El hogar de los peregrinos

Abandono y ruina se observa en el edificio donde se encuentran la trasera de Palacio y la calle Herrerías. En general, poco tiene que ver la imagen actual de este rincón de Logroño con la de 1987, año en el que se decidió intervenir en el inmueble para saldar una deuda que la ciudad tenía con el Camino de Santiago. Costaría seis años, pero finalmente en 1993 se inauguró el albergue municipal de peregrinos, un lugar por el que han pasado decenas de miles de caminantes hacia Santiago desde entonces, encontrando acomodo en una entrada a la ciudad que hoy en día cuenta con aire renovado.

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