«Ya no pienso en los golpes»
El najerino Adrián Fernández Pérez es campeón de España de kickboxing de 16 a 18 años
El pasado mes de julio se proclamó campeón de España de kickboxing en la categoría de menos de 63 kilos, de 16 a 18 años, ... en Azuqueca de Henares tras superar a cuatro rivales. Adrián Fernández Pérez es de Nájera, tiene actualmente 19 años y estudia segundo curso en el grado medio de Atención a Personas en Situación de Dependencia en el colegio Menesiano de Santo Domingo.
– ¿Cómo se inició?
– Empecé hace unos cuatro años y lo hice porque hacía fútbol y, por el tema de que no me cuadraban los horarios, lo tuve que dejar. Me dediqué a la natación, decidí empezar en el kickboxing por probar, me fue gustando y decidí seguir en ello.
– ¿Ha sido la primera vez que competía en un nacional?
– No. La primera pelea, como suele ser normal para los luchadores, la tuve pronto. Llevaba diez meses entrenando y tuve la primera pelea en ring con 16 años recién cumplidos. En cuanto a peleas llevo bastantes, unas diez en ring, y en tatami, no llevo la cuenta, pero serán unas veinte o veinticinco.
– ¿Qué diferencia hay entre pelear en ring o en tatami?
– Se diferencian mucho. En tatami tuve que pelear porque te lo exigen para poder meterte en los campeonatos nacionales cuando eres menor de 18 años. He participado en dos campeonatos de España, el primero no me salió bien porque era mi primer año y me faltó experiencia. Lo cierto es que fui para eso, para adquirir experiencia y para pasarlo bien.
«Intentaré llegar hasta donde se pueda. Lo más lejos posible y lo que me permitan mis cualidades»
– ¿Dónde se ha formado?
– En el gimnasio de mis preparadores: Dioni Muñiz y Susana Jiménez. Ellos son los que me marcan las pautas, me buscan peleas y están en mi esquina en los combates.
– ¿Cómo se llega a campeón?
– Cuando empiezas a pelear, en vez de pensar en ganar piensas en gestionar los nervios, porque en las primeras peleas en ring, que es donde hay potencia y donde es toda la chicha, te centras en el miedo que tienes a los golpes. Pero ahora ya, con experiencia, ya no pienso en los golpes que pueda recibir, sino en qué tengo que hacer para pelear lo mejor posible.
– ¿Hasta dónde va a llegar?
– Hasta donde se pueda, hasta donde crea que puedo hacerlo, que puede ser bastante. Al final en este deporte tienes que tener algo que te diferencie de los rivales, por ejemplo, yo creo que tengo mucha rapidez. También lo que importa es el sacrificio, ya que en época de peleas no puedes salir por ahí, porque esto no es como el fútbol, aquí vas a recibir golpes y tienes que pensar que tu rival está entrenando duro y debes hacer lo mismo. Intentaré llegar lo más lejos posible y lo que me permitan mis cualidades.
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