Todos los partidos, salvo el PSOE, acordaron en el pleno solicitar más agentes de la Guardia Civil

La cuerda entre el PP y el PSOE ya se había tensando por la mañana cuando la alcaldesa de Calahorra, Mónica Arceiz, compareció para poner de manifiesto la «inacción» del Gobierno de España para completar las vacantes de agentes en la Guardia Civil de la localidad y la acusación después de la Delegación del Gobierno en La Rioja a la regidora de falta de «lealtad» con la Benemérita. «Calahorra tiene más presencia de la Guardia Civil de la que nunca había habido en los últimos 20 años y eso se lo ha dicho aquí (en una Junta de Seguridad en el salón de plenos) un agente», le espetó a la alcaldesa el portavoz adjunto del PSOE, Esteban Martínez, quien además le afeó por ser «incapaz de cumplir aquello que usted mismo prometía, más seguridad en la ciudad», durante la campaña electoral. No obstante, después remarcó, como también hizo el concejal de IU que, a pesar de los últimos acontecimientos, Calahorra «no es una ciudad insegura».

El portavoz del PP, Antonio Mazo, explicó por su parte que la Guardia Civil de Calahorra ha sufrido un «descenso progresivo y notorio» en cuanto al número de efectivos, los cuales actualmente solamente representan un «59%» del total que debería tener la plantilla. Por lo tanto, abundó en que la finalidad de la moción no era que otra que la de «demandar más efectivos para una mayor seguridad». «La conducta social está cambiando en las calles» y «todos tenemos que ir de la mano», apuntó Mazo al pedir el apoyo de los partidos para instar al Ministerio del Interior a que cubra toda las plazas del cuartel calagurritano. La proposición salió así adelante con los votos a favor de PP, Vox e IU, y el rechazo del PSOE.

La tensión por el estado de la seguridad en el municipio se hizo patente sobre todo en la moción de Vox para condenar la grave agresión del fin de semana, que también fue aprobada con el apoyo de PP, Vox e IU, y la abstención del PSOE. Esteban Martínez acusó entonces a los concejales de PP y de Vox de «hacer populismo» con este asunto, a la vez que apuntó que «no es la primera vez que suceden hechos de este calibre» en Calahorra. De hecho, «han sucedido con tasas de criminalidad más bajas», apostilló.

La portavoz de Vox elevó el tono al comprobar que el PSOE no se iba a a sumar a la moción de condena, por lo que les criticó por «buscar la forma más retorcida y nauseabunda para no votar a favor». A continuación reprochó a los socialistas su actitud cuando los responsables del incidente son «cuatro descerebrados que están atemorizando por la noche». En este sentido llegó a lamentar haber escuchado decir estos días a un grupo de jóvenes que «se tienen que ir las fincas de recreo (a divertirse los fines de semana) porque les da miedo salir por la noche».

Y ante la acusación de 'populismo' que lanzaron los socialistas a los partidos de derechas, el portavoz del PP, Antonio Mazo, censuró que la concejala del PSOE Mercedes González responsabilizase al Gobierno municipal del suceso del sábado a través de una afirmación en las redes sociales. «Ocio sin censura. Lo dijeron alto y claro. Es su modelo de ocio. Ahora que nadie se lleve las manos a la cabeza», criticó Mazo que la edil socialista escribiese desde su perfil en Facebook. No obstante, el portavoz adjunto del PSOE, Esteban Martínez, ya había precisado antes que «la (actual) alcaldesa no es la responsable de los datos de seguridad de Calahorra como no lo era la anterior».