Gobierno y Delegación instan a que la llegada de refugiados se realice siguiendo cauces oficiales

Ante la marea de solidaridad particular que se ha desatado en la región por el conflicto en Ucrania, desde el Gobierno de La Rioja y la Delegación del Gobierno recalcaron ayer la importancia de que todas las actuaciones, como llegadas o ayudas materiales, sean canalizadas a través de las vías oficiales dispuestas a nivel nacional o de organizaciones internacionales contrastadas y conocedoras del terreno. Destacan recursos como las solicitudes de protección temporal, los Centros de Recepción, Atención y Derivación (CREADE) y la gestión de Cruz Roja como encargada del sistema nacional de protección. A través de esta institución, 73 ucranianos desplazados han sido atendidos en La Rioja, la cifra oficial, si bien desde las instituciones se estima un número superior, sobre los que se solicita una regularización para gestionar su plena atención. Además, 13 menores están ya escolarizados.

El Centro de Coordinación para la Respuesta de la Crisis Humanitaria en Ucrania celebró en la tarde de ayer su segunda reunión, tras la que María Marrodán, delegada del Gobierno en La Rioja, destacó que «desde el primer momento se ha dado una respuesta y se ha sido responsable en ofrecer atención a toda persona ucraniana que ha llegado, sea como haya sido su llegada». Recordó como la vía principal dispuesta por el ministerio de Inclusión, Seguridad y Migraciones, la creación de cuatro Centros de Recepción, Atención y Derivación (CREADE) en Pozuelo de Alarcón, Alicante, Barcelona y Málaga, a través de los cuales se gestionará la llegada de refugiados y se distribuirán entre las comunidades autónomas. En La Rioja «todavía no hemos llegado a ese punto, estamos resolviendo las emergencias», apuntó Marrodán.

La Policía Nacional registró en el día de ayer 29 solicitudes de protección temporal, esa fórmula que, en 24 horas, brinda a los refugiados de la guerra en Ucrania los permisos de residencia y de trabajo y otras prestaciones. Es el primer paso que debe darse por parte de los desplazados, ofreciéndose posteriormente el empadronamiento, la tarjeta sanitaria y la escolarización, así como atención psicosocial y jurídica, descuento en los medicamentos, etc.

«Hay gente que viene a La Rioja porque tiene a sus familiares y amigos y eso es lógico», pero que «lleguen de repente 150 personas sin ningún tipo de preaviso ni puesta en conocimiento de las autoridades dificulta la calidad de la respuesta», subrayó la delegada del Gobierno.

Por su parte, Álex Dorado, portavoz del Gobierno de La Rioja, insistió en la necesidad de que la llegada se realice de forma «ordenada y manteniendo la comunicación con las autoridades», recordando además que «hemos puesto alojamientos a disposición del ministerio». No se han necesitado aún, si bien el Gobierno espera en próximas fechas ese requerimiento, mientras que es Cruz Roja la encargada de facilitar alojamiento a aquellos que no cuentan con él, por el momento 22 personas.

En cuanto a esas necesidades habitacionales, Cruz Roja dispone en primer lugar sus recursos, adaptados a la situación; después se emplearían los ofrecidos por el Gobierno de La Rioja y los ayuntamientos y finalmente los de particulares. Comentó María Marrodán que «esta crisis va a durar tiempo y va a haber muchas oportunidades de ayudar», recordando a los ciudadanos la posibilidad de ofrecer alojamiento para refugiados así como la acogida a menores, para lo cual ya se han declarado a diez familias como aptas tras el estudio de su solicitud.

«Vamos a trabajar con el sistema nacional de protección para poner a disposición todos los medios del Gobierno de La Rioja para no dejar a nadie atrás», señaló Dorado. Por ahora, estiman que La Rioja puede atender a 35 personas al día, cifra que se ampliará en base a la demanda.