Las claves del conflicto del transporte
Por segunda vez en lo que va de año, parte de los transportistas autónomos ha apagado los motores de los camiones. En la guantera de ... sus reivindicaciones destaca la denuncia de que siguen trabajando a pérdidas a pesar de estar prohibido. Pero, hecha la ley, hecha la trampa: «¿Cómo vamos a denunciar a nuestros jefes? Eso nos deja a los pies de los caballos». Entre tanto, el Ministerio de Transportes no mueve ficha. La huelga precedente, la de marzo, comenzó de forma similar.
¿Quién convoca la huelga?
la Plataforma en Defensa del Transporte, la misma que convocó los paros del pasado mes de marzo. Aglutina a pymes y autónomos que no se sienten representados por las patronales con interlocución directa con el Gobierno a través del Comité Nacional del Transporte de Mercancías (CNTM), órgano al que sí pertenecen Fenadismer (la representante en la mesa de negociación de Atradis, la patronal del sector perteneciente a la Federación de Empresas de La Rioja) y la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM), que tiene delegación en la comunidad.
¿Por qué?
El principal motivo para la huelga es que, según la Plataforma, continúan trabajando a pérdidas, a pesar de que, fruto del paro de marzo, el Gobierno aprobó la ley de la Cadena del Transporte para impedirlo.
¿Cuánto durará?
La primera huelga –en junio hubo un amago de protesta que finalmente no prosperó–, también convocada por la escala alcista del precio del gasóleo, se extendió por espacio de tres semanas. La duración de la que se inició ayer es indeterminada, aunque la Plataforma considera que en próximos días «irá cogiendo calor».
¿Qué consecuencias puede tener?
Perjudica la actividad comercial en una de las épocas del año de mayor consumo, ya que el 'Black Friday' es la antesala de la Navidad. También para los propios transportistas y empresas cargadoras, ya en estas fechas generan el 25% de todo su negocio anual. Si, además, se alarga de forma indefinida puede ocurrir que, como en marzo, se produzca escasez y encarecimiento de determinados productos básicos, aunque sin llegar al desabastecimiento. El coste estimado al día de esta protesta en el conjunto del país asciende a unos 600 millones de euros.
¿Qué responde el Ministerio de Transportes?
Que si alguien se está saltando la Ley «hay que denunciarlo», una respuesta que no ha satisfecho a la Plataforma que ha seguido adelante con su movilización, a pesar de los llamamientos a «la responsabilidad» del Gobierno. Los transportistas aseguran que no pueden hacerlo porque eso les dejaría «a los pies de los caballos» ante sus jefes. Ayer mismo, los profesionales marcharon en manifestación en Madrid para terminar concentrándose ante Transportes. Ningún representante del Ministerio les recibió.
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