El centro de salud de La Villanueva empezará a atender en enero a los 10.000 pacientes del Rodríguez Paterna

El nuevo centro de salud de La Villanueva ya está listo para iniciar su actividad y, a principio del próximo mes de enero, empezará a atender a usuarios y pacientes de forma paulatina, siendo los primeros los usuarios del centro al que sustituye, las adscritas hasta ahora al Rodríguez Paterna. La Villanueva será la referencia sanitaria para 19.272 logroñeses; 10.566 de ellos pertenecen al Rodríguez Paterna y, el resto, son usuarios del Gonzalo de Berceo, Joaquín Elizalde y Espartero, que serán derivados de forma paulatina a lo largo del primer trimestre del próximo año, 2025.

El presidente del Gobierno de La Rioja, Gonzalo Capellán, ha inaugurado este lunes, 23 de diciembre, el flamante edificio sanitario tras recorrrer las nuevas instalaciones acompañado por la consejera de Salud y Políticas Sociales, María Martín, el alcalde de Logroño, Conrado Escobar, la gerente de Atención Primaria, Begoña Ganuza; la arquitecta, Eva Aransay; y representantes de los colegios profesionales sanitarios y de las asociaciones de vecinos del Casco Antiguo logroñés, entre otros.

Todos los futuros usuarios del nuevo centro de salud recibirán en su domicilio una carta de la gerencia del Seris, en la que se les informará de las ventajas de la atención en La Villanueva por las instalaciones y nuevos servicios que ofrecerá, además de recordarle una vez más el derecho que le asiste de libre elección de centro y profesional sanitario. La app y la web www.riojasalud.es serán asimismo canales para solventar dudas, así como el teléfono de Salud Responde 941298333.

Un total de 44 profesionales van a atender a la población adscrita a este nuevo centro, plantilla que supone prácticamente duplicar la actual del Rodríguez Paterna, que contaba con un equipo de 23. En concreto, se pasa de 7 a 12 médicos de familia; de 1 a 2 pediatras; de 8 a 14 enfermeras; de 3 a 6 auxiliares administrativas; de 1 a 2 celadores; y de 1 a 2 trabajadores sociales; también se pasa de 1 a 2 matronas y de 1 a 2 TCAEs (Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería), además de sumar una nueva unidad de salud bucodental con odontólogo e higienista dental. De las 44 plazas, 8 son de nueva creación y 13 están cubiertas por profesionales de los centros de salud de origen de la mitad de los pacientes que a partir de ahora pertenecerán a La Villanueva.

El incremento de personal va a dar respuesta al mayor número de usuarios y también a una ampliación de horario, ya que hasta el momento en el Rodríguez Paterna únicamente había atención de mañana mientras que en La Villanueva la atención será en horario de mañana y de tarde. En ese sentido, la gerente de Atención Primaria, Begoña Ganuza, ha destacado que «este nuevo centro nos va a permitir mejorar la calidad asistencial de todos los pacientes que están tanto en esta zona, como en otras zonas de Logroño porque vamos a reorganizar todos los centros de salud de la capital riojana mejorando el servicio sanitario de la ciudad», ha dicho.

Respecto a la cartera de servicios, el Centro de Salud La Villanueva va a proporcionar: Medicina de Familia, Enfermería, Enfermería obstétrico-ginecológica (Matrona), Pediatría, Trabajadora Social, Vacunación, Pediatría, Cirugía Menor Ambulatoria, Atención sanitaria domiciliaria, Obtención de muestras, Electrocardiología, TAO (Tratamiento Anticoagulante Oral), Trabajadora Social, Test del aliento, MAPA (Monitorización Ambulatoria de Presión Arterial), Educación sanitaria grupal, Crioterapia, Ecografía, Espirometrías, Teledermatología y Odontología / Salud Bucodental, este último servicio de nueva creación.

Los cambios en el entorno de La Villanueva serán los más significativos dentro de la organización de la Atención Primaria en Logroño. No obstante, se va a aprovechar también para compensar la atención en otras dos zonas: Labradores y Siete Infantes, buscando un mayor equilibrio de la población de Logroño en los diferentes dispositivos. Así, la nueva delimitación de las zonas básicas de salud se ha llevado a cabo aplicando criterios de proximidad y de equilibrio poblacional intentando procurar la mayor calidad de servicio a los ciudadanos.

Tras el recorrido por las instalaciones, el presidente del Gobierno de La Rioja, Gonzalo Capellán, ha trasladado un agradecimiento expreso, que personificó en el doctor Pedro Marco, director de la zona básica de salud de La Villanueva tras casi dos décadas como coordinador del servicio de Urgencias, a los profesionales de Atención Primaria por «su implicación y colaboración» en la nueva delimitación de las zonas básicas de salud de Logroño vinculada a la entrada en funcionamiento de La Villanueva, «que favorece una distribución más equilibrada de pacientes en los cupos de medicina de familia y pediatría atendidos por los profesionales en cada centro, lo que redunda en una asistencia de mayor calidad».

Asimismo, el jefe del Ejecutivo regional ha destacado que «esta apertura se enmarca en el compromiso que tenemos de mejorar esa presión asistencial del sistema sanitario de La Rioja con infraestructuras. Estamos dando pasos importantes con la ampliación del Hospital Universitario San Pedro o la ampliación del Centro de Salud de Calahorra, entre otros».

Por su parte, el alcalde de Logroño, Conrado Escobar, ha subrayado que «la apertura de La Villanueva es una excelente noticia tanto para la salud como para la ciudad de Logroño, en concreto para el barrio de La Villanueva. Este centro transforma el panorama sanitario logroñés y riojano y mejora esta zona de la ciudad por su diseño arquitectico o la funcionalidad del edificio».

Por su parte, la arquitecta, Eva Aransay, ha detallado las peculiaridades del centro, con casi 5.000 metros cuadrados de superficie construidos, para destacar que «es un edificio que está integrado, tanto por su color como por su volumen con los edificios de la zona, de este modo la piedra arenisca nos recuerda al Puente de Piedra, que es el origen de nuestra ciudad». Asimismo, ha señalado que «a la hora de implantar el edificio en la parcela se decidió crear una pequeña plaza de acceso, que le da personalidad», ha dicho.

Aransay, además de resaltar que «este es un edificio postcovid y se revisó todo el proyecto para que todos los materiales de acabado fueron lavables y desinfectantes y, además, se ha previsto un circuito diferenciado con zonas de entrada y salida propias para el caso de que haya que atender a personas contagiadas», ha especificado que es una construcción de »alta eficiencia energética, no en vano se ha construido con estándares que se aproximan al passivhaus que buscan precisamente optimizar esa eficiencia. Así, cuenta con dos fuentes de energía renovables: la geotermia, que aprovecha la temperatura casi constante del suelo a través de los 24 pozos construidos en su subsuelo, de 150 metros de profundidad; y una instalación fotovoltaica, situada en la cubierta, para autoconsumo del edificio. La climatización se realiza mediante suelo radiante-refrescante y ventilación atemperada, por lo que ninguna estancia recibirá aire recirculado de otras zonas. No tiene calderas ni de gas, ni de gasóleo, ni de ningún otro combustible fósil y funciona con bombas de calor que aprovechan estas fuentes de energía renovables«.

En su construcción se ha tenido especial cuidado con la acústica, ha señalado también la arquitecta, quien ha aclarado que «por un lado, para que el edificio no produzca emisiones de ruido en su entorno y, sobre todo, se ha cuidado la protección de la intimidad de los usuarios, utilizando tabiques con el aislamiento acústico necesario y puertas de consulta acústicas, por lo que se garantizará que las consultas estén aisladas correctamente. También se ha cuidado la acústica de las salas de espera para que resulten confortables y especialmente la de la sala de educación sanitaria (o de la comunidad)».

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