La sequía sacude el cereal

El clima está siendo el peor enemigo de los agricultores riojanos este año. Si las heladas han provocado graves daños en las viñas, la sequía está causando estragos en el cereal. De hecho, las previsiones apuntan un descenso considerable de la cosecha con respecto a ejercicios anteriores.

Expertos en la materia como Abel González, de ARAG-ASAJA, califican la situación actual como dramática. «Llevamos una tercera parte de las precipitaciones del año pasado y la evotranspiración ha sido dos veces mayor», señala. «Eso quiere decir que tenemos seis veces menos agua disponible que en el 2016», apostilla. González, además, se lamenta de la dificultad que existe para revertir esta problemática. «Hay productos que están tocados de muerte este año y que, por mucho que llueva ya, van a tener unos rendimientos muy bajos», expone.

La ausencia de lluvias se ha unido al calor de semanas anteriores para hacer que cultivos como la cebada temprana estén adelantados con respecto a campañas previas. «Se han puesto a espigar y, al no tener humedad abajo, todos los hijos se han muerto y eso se va a traducir en una merma de cosecha muy grande», afirma Óscar Salazar, presidente de la UAGR. «De hecho, ya se puede afirmar que la cosecha de cereal de este año no va a ser ni parecida a la del año pasado, ya que en muchas zonas puede haber un descenso de entre el 50 y el 60%», añade.

Aparte del cereal, otros cultivos se pueden ver seriamente perjudicados por esta ausencia de precipitaciones. «Hay productos de regadío como la patata o la remolacha que sin agua no van a poder salir adelante», apunta Salazar. «Y en secanos como los de mi pueblo, Foncea, nos estamos planteando la siembra de girasol porque no hay buenas condiciones», apuntilla. González, mientras, hace incidencia en el regadío. «Se están planificando muchos de los cultivos de implantación primaveral y hay agricultores que se están lo están planteando porque no está asegurado el riego», señala el técnico de ARAG-ASAJA. «En los cultivos que ya están implantados, como patata, remolacha, zanahoria o adormidera podemos igualmente encontrarnos con falta de agua para poder realizar un riego normalizado», remata.

Ante este escenario, González remarca la importancia de contratar seguros para luchar contra estas incidencias climatológicas. «Es una herramienta imprescindible, que debería contar con más ayudas por parte de la administración», dice. «Es barato y cubre problemas como el de la sequía, la fauna silvestre, el pedrisco o las heladas», enumera el técnico de ARAG-ASAJA, quien señala los bajos precios como otra de las circunstancias que influyen negativamente en el sector del cereal. «Hay países como Rusia, Estados Unidos o China que están inundando el mercado internacional con sus productos», señala. «La sequía no va a influir en estos precios», apostilla. Óscar González, por su parte, califica los precios actuales como un desastre. «Estamos vendiendo un 40% por debajo que hace cuatro o cinco años, los costes de producción son cada vez más elevados y las ayudas de la PAC disminuyen», cuenta. «Así, o este sector se cuida de otra manera o en muchas zonas va a terminar por desaparecer», concluye.