AMIN, la asociación riojana que derriba todas las fronteras

Somos ciudadanos de un lugar llamado mundo. De un planeta donde las culturas se enriquecen unas de las otras. Vivimos en un espacio repleto de barreras artificiales que distancian naciones, familias y amigos. Un lugar llamado mundo que empieza a abrir los ojos para enseñar que todos somos iguales, sin colores, sin religiones o idiomas que nos separen. «Más allá de nuestra forma de pensar, están las personas», afirma el presidente de AMIN, Samar Javed.

La Asociación Mundo Inmigrante (AMIN) es uno de los múltiples centros que trabajan a diario en La Rioja, desde el año 1997, para materializar una realidad inclusiva y multicultural. «Se trata de una asociación creada por y para las personas inmigrantes», destaca su presidente.

Su principal objetivo es la inserción de las personas extranjeras en la sociedad riojana: «Les enseñamos las normas y la cultura española para que les resulte más sencillo integrarse», explica Samar Javed. Desde AMIN acompañan a sus muchos usuarios, 1.450 personas, en todos los procesos desde que llegan a España hasta la obtención de un trabajo o una educación. Su actividad se divide en el sector laboral, jurídico y social. Asimismo, cuenta con una bolsa de trabajo y de alquiler y disponen de varios traductores para que todos aquellos inmigrantes que no sepan hablar español puedan realizar los trámites necesarios antes las Administraciones Públicas a su llegada al país.

Desde la asociación desarrollan programas y talleres para la integración, subvencionados tanto por el Ayuntamiento de Logroño como por el Gobierno de La Rioja, con especial colaboración del IRJ. Una de sus principales acciones se centra en el apoyo para la igualdad de la mujer «en su rol como ciudadana social de pleno derecho, con poder de decisión, rompiendo las barreras y limitaciones del ideario cultural», afirma Samar Javed; así como «nuestro total apoyo y acompañamiento para todas aquellas que están sufriendo violencia machista en casa y necesitan ayuda con los procesos legales o con la traducción».

Aunque se muestran bastante optimistas con el futuro, quieren pedir, en palabras del presidente de AMIN, «que los españoles nos abran sus puertas ya que no somos unos delincuentes y la integración debe ser algo esencial para todos».