«Mi madre será la primera persona en la que piense cuando vuelva a jugar»
El jugador cubano vuelve a las pistas este sábado después de 287 días lesionado
Sábado, 6 de mayo de 2023. Palacio de los Deportes de Santander. Semifinal de la Copa del Rey. Ciudad de Logroño-Atlético Valladolid. En un ... lance del juego el lateral derecho franjivino Ángel Rivero nota cómo un jugador rival cae encima de su rodilla derecha. Resultado: rotura del ligamento cruzado. Por delante una operación, lágrimas, rehabilitación, gimnasio, sonrisas, pista, balón y... 287 días después regreso a las canchas. Será este sábado (16.00 horas) en el Palacio, frente a Puerto Sagunto.
– Lo primero de todo, ¿cómo está de físico y de cabeza?
– Físicamente me encuentro bien y mentalmente también. Es cierto que tras estar mucho tiempo fuera de la pista –casi 9 meses– al final va a costar pero con muchas ganas de empezar.
– Es usted un hombre reposado y tranquilo. ¿Esto le ha ayudado a soportar con mejor actitud este largo periodo?
– Sí, por esa parte no me afectó mucho porque soy muy tranquilo y trataba de llevarlo de la mejor forma posible. Al principio sí podía ser un poco incómodo, porque es una lesión grave. A ningún jugador nos gusta pasar por ahí, pero lamentablemente nos toca mucho. Pero en el momento que pasa hay que enfrentarla, y ya está.
– 287 días... cuando mira hacia atrás, ¿qué le viene a la mente?
– Una lesión de rodilla así siempre es duro además de muy largo. Son muchos meses, se dice pronto pero es casi un año. Y estás con ansia de ver el equipo entrenar y jugar y no poder hacer lo que te gusta. Te vas sintiendo mejor en función de cómo va evolucionando la recuperación.
– Digerir todo este periodo en un club familiar, como el Ciudad de Logroño, ¿ayuda?
– Sí, es cierto que la ayuda en la recuperación parte de uno mismo, y también de la ayuda de la familia, la ayuda de los compañeros de equipo, el cuerpo técnico, los médicos, el fisio, los doctores, incluso los aficionados, gente que se preocupa, que te ven y preguntan cómo estás. Todas esas cosas son un plus y una alegría y todos han puesto su granito de arena.
– ¿Le cuesta recordar el momento de la lesión? ¿Le cuesta hablar de ello?
– No, es algo que por mucho que lo intente no... no lo vas a olvidar y siempre te queda ahí. Fue porque me cayó encima alguien, no fue una lesión como son las típicas que la mayoría son al hacer una finta o un cambio de ritmo y se te va a las rodillas. Yo tuve, lamentablemente, la mala suerte que sin querer, un compañero del otro equipo me cayó encima, se me fastidió la rodilla y salí perjudicado. Y ese momento no quería pensar en lo peor, pero al final lo intuyes y cuando ves el vídeo te empiezas a temer lo peor.
– Es la otra cara del deporte de élite, que no solo es salir en la tele y que la gente te pida autógrafos.
– Sí pero es inevitable, por mucho que nos cuidemos a alguien le va a tocar. Lamentablemente, el tema de lesiones en el deporte es muy complicado de evitar. Por ahí pasarán algunos –ojalá pasen lo menos posibles–, pero nada, hay que plantarse, no rendirse nunca y tratar de volver lo mejor posible.
– ¿Cómo ha visto al equipo desde fuera? Porque usted se lesionó con la plantilla de la temporada pasada y se incorpora con otra distinta.
– Yo me lesiono en la Copa del Rey y ahí nos clasificamos para Europa. En el equipo había otros jugadores tocados, y aún así trataron de terminar la Liga lo mejor posible. Y en el inicio de esta temporada no nos salieron las cosas bien porque no empezamos sacando los puntos que debíamos haber sacado. Pero con el trabajo de día a día, de semana a semana pudimos terminar y hacer un final de primera parte muy bueno.
– Y cuando ya está preparado para volver le caen dos partidos de sanción por salir a la pista al final de un partido para separar a los compañeros en una riña.
– Ya, pero fue inevitable, hay que respetar la ley. Lo reflejaron en el acta de Asobal y bueno, hay que parar en esos dos partidos. Lamentablemente nos tocó a mí y a Javi (García) y nada. Ya han pasado los dos partidos y ahora esperar que llegue el del sábado.
– ¿Estará con unas ganas enormes de saltar a la pista?
– Sí, sí, con muchas ganas, se hace largo, como he dicho, se hace largo la espera. Estás diciendo ¡cuándo me va a tocar poder estar allí ayudando al equipo!, porque desde ya hemos estado gritando, aplaudiendo. Ahora con ganas de portar también mi granito de arena desde dentro.
– Hubo un momento de la temporada que los jugadores lesionados se sentaban detrás del banquillo del Ciudad de Logroño y parecían una peña más?
– Sí (risas), pero incluso habiendo pocos jugadores, pudimos mantener el ritmo de trabajo y han sido capaces de ir sacando partido a partido. Ahora, gracias a Dios, hay pocos tocados, vamos a ver que si nos respetan las lesiones en esta segunda vuelta.
– Cuando salte este sábado a la pista del Palacio de los Deportes, vestido de corto, ¿quién va a pasar por su cabeza?
– Lo primero, mi madre. Mi madre y después todas las personas que me han ayudado con el tema de la recuperación, pero lo primero mi madre.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión