El Logroño se olvida de jugar

Regresaba a escena el torneo de la regularidad, tras el Mundial, con la visita de los hombres de Miguel Ángel Velasco a Santander para enfrentarse a un rival que esta temporada parece haberle cogido la medida.

El conjunto santanderino, tras un arranque espectacular de temporada, sumando cinco puntos en las cuatro primeras jornadas, estaba sumido desde el 23 de septiembre, fecha en la que se impuso por 34-32 a Benidorm, en un pozo profundo.

Tras un inicio igualado de encuentro, en el que se sucedieron las alternancias en el marcador, fue el conjunto riojano el que pareció coger las riendas del dueño, al disponer de una ventaja de dos goles, tras el tanto de David Cadarso que situó el 3-5 a los siete minutos.

El 6:0 defensivo, con Rodríguez y Serradilla en el centro, funcionaba a la perfección y en última instancia ahí estaba Jorge Pérez en la portería, muy solvente en los primeros minutos.

El ataque fluía con la dirección de Preciado que, además, aportó tres de los cuatro primeros goles para la escuadra de Velasco.

A los nueve minutos se produjo una de las mejores noticias para el conjunto riojano, con el retorno, tras superar su lesión, del capitán Eduardo Cadarso, que cogió la batuta en ataque del equipo, pasando Preciado al lateral derecho.

Reaccionó el Sinfín, subiendo la intensidad de su 6:0 defensivo y con la aparición de un destacado Aly en portería, que comenzó a desesperar a los atacantes del Logroño, con paradas de todo tipo, en seis metros, a los extremos y alguna contra.

La igualdad fue la nota predominante durante el resto del primer tiempo, hasta que el bloqueo ofensivo de los pupilos de Velasco fue de tal magnitud que el Sinfín lo aprovechó para abrir brecha tras un tanto de Lon (min. 28). Fueron unos minutos horribles del cuadro riojano, tanto en ataque, con continuas pérdidas, y sobre todo en defensa, totalmente transparente ante los ataques de los anfitriones, que mantuvieron los tres goles de renta al final de los primeros treinta minutos (14-11).

Si la primera mitad fue bastante discreta por parte del conjunto riojano, en la segunda la cosa fue claramente a peor.

Pese a que Serradilla fue el que inauguró el marcador en el segundo tiempo, pronto se pudo comprobar que no había capacidad de reacción, menos aún con la tarjeta roja descalificante a Serradilla (min. 36), que complicaba más el panorama.

El equipo riojano estaba totalmente desnortado en ataque, con continuas pérdidas que rentablilzó el conjunto local para salir a la contra y situarse con seis goles de renta, tras el tanto de Jacob en el minuto 42.

Palomino, El Korchi y Rodríguez intentaban tirar del carro en ataque, pero el déficit en defensa hizo que Lon aprovechase cada balón que le llegaba en seis metros para ir manteniendo una cómoda diferencia para el Blendio.

En vista de que con el paso de los minutos sus pupilos no conseguían reducir la desventaja, Velasco probó a atacar con siete a diez minutos para el final. Al Sinfín le entró el miedo a ganar y empezó a cometer errores en ataque, que aprovechó el cuadro riojano para reducir la desventaja y situar un 30-28 a tres minutos del final.

Ahí terminó la reacción del Logroño, ya que primero Lon y después Leo Alonso se encargaron de ajusticiar a un equipo que decepcionó en su visita a La Albericia.