El chef Sugai Larrazabal enseña a hacer sus croquetas

Uno de los platos más reputados –y demandados– de Wine Fandango son sus croquetas, en cualquiera de sus dos variantes: Jamón Duroc y huevo duro, y setas riojanas. Pues el máximo responsable de su elaboración (y de la cocina del restaurante logroñés) ofrecerá un taller de carácter muy práctico para que los asistentes puedan replicar la elaboración en sus casas y disfrutar de esos bocados como lo hacen en Wine Fandango.

Además, aprendiendo los fundamentos de la elaboración de la masa, después se pueden ir modificando el resto de ingredientes para conseguir diferentes elaboraciones con los mismos principios.

Los asistentes elaborarán sus propias masas y Larrazabal ofrecerá los consejos necesarios para conseguir en casa, con los utensilios domésticos, una croquetas cremosas por dentro y crujientes en su exterior.

Las croquetas constituyen un plato habitual en casi todos los domicilios y un bocado recurrente de bares y cafeterías. Aunque son muy habituales en la gastronomía española, el origen de las croquetas parece situarse en Francia. Todo indica que la génesis de esta elaboración hay que encontrarla en Louis de Bechamel, un aristócrata que dirigía la cocina del rey Luis XIV, el fue el autor de la pasta de las croquetas que recibió su nombre y que no era sino una evolución de una crema de cocina.

Algún tiempo después, otro cocinero –Antoine Cámere– recubrió la bechamel de una capa crujiente, y con ello y sin saberlo, creó un plato que actualmente se puede degustar de forma habitual en España, Francia, Países Bajos...

En España, las croquetas fueron –durante mucho tiempo– una receta de aprovechamiento en la que tenían cabida algunas sobras de otras elaboraciones (por ejemplo, las croquetas de ropa vieja tienen ahí su origen) aunque con el tiempo han ido evolucionado para convertirse en un plato con entidad propia.

En La Rioja, las croquetas que Marisa Sánchez servía en Echaurren, y a las que ahora ha dado continuidad su hijo Francis en sus restaurantes, han sido el ejemplo a seguir por el resto de cocineros. Las de Wine Fandango también gozan de un especial predicamento entre los asiduos a su barra o sus mesas, y desde el miércoles, se podrán replicar en las casas de los asistentes al taller de cocina.