La canción 'riojana' de Antón García Abril

«La honestidad hecha música». El recordado compositor Antón García Abril (Teruel, 1933-Madrid, 2021) es descrito así, con una mezcla de admiración y cariño, por el pianista Rubén Fernández Aguirre. Recuerda que solían discutir amistosamente sobre quién era más importante:el autor opinaba que el intérprete y el intérprete lo contrario. Este jueves las partituras escritas por uno volverán a ser ejecutadas en Logroño por las manos del otro. Demostrarán en todo caso que ambos llevaban razón.

La Compañía Lírica de Aficionados Pepe Eizaga celebra este jueves su 95.º aniversario con un concierto extraordinario de la mano de la Fundación Antón García Abril (en el Auditorio de Logroño a las 19.30 horas). Es un evento gratuito, «un obsequio que la CLA quiere compartir con los aficionados riojanos», como destaca Cristina Toyas, en nombre de la entidad decana en música lírica en La Rioja, creada en 1929.

Desde 1983 convoca el Concurso Internacional de Canto Ciudad de Logroño, que en 2022 incluyó el premio Antón García Abril, junto con la fundación que lleva su nombre, a la mejor interpretación de canción española. Ahora ambas instituciones organizan conjuntamente este concierto con los ganadores de ese galardón en sus dos primeras ediciones:la soprano colombiana Jessica Bogado (en 2022) y el barítono catalán Ferran Albrich (2023), acompañados al piano por el vasco Rubén Fernández Aguirre.

«Va a ser un concierto muy sentimental –indica el pianista–. Yo tuve una relación muy estrecha con Antón García Abril. Trabajé con él casi todo su repertorio para voz y piano. Y ahora nos llena de emoción poder repasar su obra en esta gala. Será una buena manera de dar a conocer lo mejor de su composición».

Fernández Aguirre, pianista de prestigio internacional, especializado en acompañamiento de cantantes, es desde hace diez años jurado habitual del Concurso de Canto de Logroño. «Tiene un gran mérito llevar tantos años gestionando este concurso y hacer que a esta ciudad se la reconozca por tener un certamen internacional así. Logroño es conocido por eso en el mundo de la música», afirma.

En su opinión, «la música lírica y la música clásica no son elitistas». «A mí lo que me parece elitista es pagar ciento veinte euros por entrar a un partido de fútbol», contesta antes de animar a asistir al concierto y ayudar a romper ese tabú: «Yo no hago diferencia entre música clásica o más ligera; solo hay buena o mala música. Y yo personalmente defiendo la música española, que es parte de nuestro patrimonio cultural».