Evelyn Pérez | Presidenta del Ateneo Riojano
«El Ateneo ha de ser un espacio público y libre donde poder debatir todas las ideas»La entidad cultural decana en La Rioja comienza curso fuera de su sede y su nueva responsable lo afronta con el objetivo de asentar una próxima etapa
J. Sainz
Miércoles, 9 de octubre 2024, 08:07
El Ateneo Riojano abre curso con Evelyn Pérez (Logroño, 1972) como presidenta. Es la vigésima responsable de la entidad en su historia centenaria y la ... décima de su etapa moderna. Serán meses condicionados por las obras en la sede de Muro de Cervantes pero con el objetivo de asentar la base para una nueva etapa.
– Fue elegida en mayo. ¿Cómo se ve el cargo desde dentro?
– Ahora es cuando me doy cuenta de lo grande que es esto, del papel que juega el Ateneo, el que ha jugado en la historia de esta tierra y el que espero que siga jugando. Pero no me da vértigo porque hay detrás un equipo estupendo.
– Llegó como sucesora de continuidad, no rupturista.
– Así ha sido en los últimos relevos:de Carlos Álvarez a Jesús Murillo y de Jesús a mí. Continuamos en esa misma línea. No hay que descubrir la pólvora, hay que sumar todo lo que se pueda.
– ¿Cuáles son sus objetivos? En su día habló de colaborar con otras entidades y extender la actividad fuera de la ciudad.
– El Ateneo es Riojano y nos gustaría llevar cosas fuera de Logroño. Este año, que estamos fuera de nuestra sede, puede ser una buena oportunidad para hacerlo.
– ¿Va a ser un curso de transición?
– La actividad no va a bajar mucho. Hemos conseguido sacar adelante los cursos y actividades que son propios del Ateneo: los ciclos de Egipto, ópera, filosofía, la tertulia... Además, intentaremos organizar todas aquellas iniciativas de la gente que acude a nosotros como foro público. Y, por supuesto, aprovecharemos para pensar bien el curso próximo y añadir áreas:ciencias, salud mental...
– ¿Por qué estas obras?
– Había que hacerlas en algún momento y creímos que no se debían retrasar más. Nos pareció oportuno entrar en esta nueva etapa, tras el centenario, con la sede en perfectas condiciones.
– ¿Qué reformas se harán?
– Todo empieza por los baños: tienen un escalón y hay que suprimirlo para facilitar la accesibilidad. Eso nos lleva a nivelar el suelo de todo el piso, que se estaba hundiendo. Yharemos también un par de reformas más en la oficina y en la sala principal.
– Están presupuestadas en 135.000 euros. ¿Cómo se pagan?
– Las paga íntegramente el Gobierno de La Rioja, que es quien tiene el inmueble a su cargo. Hay cosas que no se han podido incluir porque encarecían mucho el presupuesto, como el aislamiento de los balcones.
– ¿Cuánto van a durar?
– Está previsto que comiencen a final de año y que duren mínimo seis meses. A mí me gustaría cerrar el curso en la sede, pero creo que es más sensato pensar en la inauguración del próximo.
– Mientras tanto, el Ateneo desarrollará su actividad en lugares como el Ayuntamiento, la Biblioteca de La Rioja, el Círculo Logroñés... Imagino que es gratificante encontrar esa sintonía.
– Ha sido una sorpresa muy agradable. Lo esperaba de las administraciones, porque, de hecho, a ellas les interesa la actividad que promovemos. Pero el apoyo de una sociedad privada como el Círculo, lejos del ideario del Ateneo –porque es una entidad casi exclusivamente por y para sus socios–, ha sido muy gratificante. Seguramente, de esta colaboración puntual, surjan más cosas.
– El mayor problema del Ateneo es su financiación y el retraso en el cobro de las subvenciones públicas [35.000 euros del Gobierno el año pasado y 8.884 del Ayuntamiento]. El ejercicio anterior se salvó in extremis. Pero ¿han resuelto el problema?
– No. Dependemos de un sistema de libre concurrencia y a mí me gustaría establecer otro modelo, una especie de convenio que no nos deje tan expuestos, que nos dé estabilidad y nos permita programar a más largo plazo.
– Cuando el anterior presidente pidió ayuda a la sociedad riojana hubo un aumento considerable de socios.
– La gente respondió muy bien y subió mucho;actualmente somos unos cuatrocientos. Querríamos mantenernos o crecer, hacer un llamamiento como labor social.
– ¿Cómo lograrlo? ¿Cuál ha de ser el papel del Ateneo en el siglo XXI para que la gente responda?
– Amí me interesa mucho su parte cultural pero también entiendo su gran importancia social. Tiene que ser un foro donde la sociedad pueda exponer y debatir cuestiones que quizás no encuentran otro lugar. El Ateneo ha de ser un espacio público y libre, un espacio de toda la sociedad donde poder debatir todas las ideas. Esa es la base y la esencia:hablar y entendernos y buscar caminos nuevos por lo que transitar juntos.
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