La Rioja protege a sus mascotas

Perros, gatos, pájaros... cualquier animal que se tenga por mascota celebró este viernes su 'día grande'. Y es que su patrón, San Antón, extendió su bendición sobre todos ellos; aquellos a los que sus dueños acercaron hasta las iglesias de un gran número de pueblos riojanos. Porque San Antón es una festividad muy arraigada, tanto que llega acompañada de misas, procesiones, hogueras y una buena dosis gastronómica.

Como siempre, fueron muchas las personas que acudieron a la plaza del Mercado, en Logroño -mascotasen brazos-, para recibir las bendiciones. No faltó la música ni un chocolate. Todo ello, cortesía de la Protectora de Animales. Las bendiciones continuaron por multitud de pueblos... (por ejemplo, Grávalos) y también las hogueras, como el centenar que iluminaron la noche en Alfaro, una tradición prendida entre las cuadrillas y familias que, además, comparten cena. La primera en encenderse fue la municipal, en la placeta San Francisco, donde la degustación fue solidaria.

Algunos se adelantaron y el jueves brillaron en Cervera, Rincón de Soto, Pradejón, Quel o Villamediana ('márcharas', colofón a la Navidad)... Otros pueblos se reservan para el fin de semana, como Calahorra (bendiciones, misas, procesión y degustaciones entre el sábado y el domingo), Torrecilla (este sábado quema la 'Marcha') o Munilla (comida de hermandad y subasta, entre otras). Y, por supuesto, todas ellas fueron convenientemente acompañadas con copiosas viandas.

Este viernes también hubo fuego en Ojacastro, pero para preparar sus populares 'habas de San Antón', de las que se repartieron unas 2.000 raciones entre cientos de personas.

Y, entre todas, tal vez la más singular se ha celebrado en Nájera gracias a la recuperación por parte de la peña Juventud del 'Sermón de San Antón', un acto perdido hasta ahora que mezcla la tradicional bendición con la lectura del sermón. El 'sermonero', sobre su caballo, llega a la plaza de la Cruz, donde el párroco bendice a los animales y acto seguido se lee el sermón.

Una agradable y merecida fiesta para los animales, que tanta compañía hacen.