El barrio Entre Ríos se desenreda tras más de dos décadas de abandono
El Ayuntamiento, que ya es responsable tras resolver una situación «enquistada», ha adjudicado la obra de una pista multideportiva y plantea un parque infantil
Todo comenzó hace más de dos décadas, cuando en plena expansión de Lardero se planteó la construcción de un centro comercial en el nuevo ... barrio Entre Ríos, delimitado por las célebres urbanizaciones Villa Patro y Montesoria y la N-111 y la AP-68. Entonces se proyectaban al mismo tiempo el Berceo en Logroño y Las Cañas en Viana, que fueron una realidad, no así el de Lardero, que quedó muerto pese a la urbanización del Sector T-1, en la que aún se conservan los amplios aparcamientos y la avenida de continuación de la calle Río Duero, eso sí, vandalizada y con la maleza creciendo como selva.
La situación, heredada por los sucesivos equipos de Gobierno de Lardero, derivó en un abandono de la zona, que apenas cuenta con servicios. El Ayuntamiento recoge la basura y poda los árboles pero hasta esta legislatura no se había realizado ni una sola obra en la zona, como el arreglo de una calle peatonal, el vallado de los solares municipales y la construcción de un parking. El motivo era que la junta de compensación continuaba siendo propietaria de la zona y, por tanto, responsable del mantenimiento.
Sucedió que Iberdrola debía construir una subestación eléctrica para abastecer de energía a la zona, que en su vasta concepción original incluía un área comercial y otra de uso específico para una residencia de mayores. Al no disponer de un terreno para construir la subestación, Iberdrola demandó a la junta de compensación, descubriendo problemas con la titularidad de los terrenos, mal registrados. Y en todo ese transcurso de tiempo, entre los muchos propietarios de las fincas, algunos habían fallecido, otros permanecían en paradero desconocido fuera de España...
A día de hoy la zona sigue sin autobús, algo muy criticado por la oposición, y sin subestación eléctrica
La situación, por tanto, estaba «muy enquistada», como definió la teniente de alcalde, Marta Gómez, en el pleno del pasado miércoles. Pero recogiendo la estela del proceso abierto por Iberdrola, el actual equipo de Gobierno (PP y Cs) inició su particular trabajo para intentar recuperar el control sobre la zona. Mientras tanto se han sucedido por parte de la oposición las críticas y mociones para dotar de servicios a Entre Ríos, como un autobús urbano que comunique el barrio, uno de los puntos clave del acuerdo de gobierno entre PP y Cs y que, a día de hoy, no es una realidad, al igual, curiosamente, que la subestación eléctrica.
Lo que sí es cierto es que el Ayuntamiento requirió el cambio de concepción de la junta de compensación por cooperación, esta no ha alegado y, por tanto, no es necesaria la recepción de la zona para la actuación municipal, ejecutando el aval de 375.000 euros de los propietarios como garantía. La junta de gobierno local de esta semana acordó la contratación, por 32.667 euros, de la obra de una pista multideportiva y la semana que viene se prevé adjudicar otra para un parque infantil, dos de las dotaciones que faltaban, junto a la subestación, para recibir el Sector T-1. Esto, unido a la incidencia de la obra de la Ronda Sur y a que hace dos años las fincas comerciales fueron adquiridas por nuevos propietarios, hacen prever la resurrección de Entre Ríos.
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