El Ayuntamiento distribuirá 600 pulseras 'Centinela' entre los jóvenes en fiestas

Las pulseras, ideas por la empresa navarra Aglaya Creativos, ayudan no sólo a detectar si una bebida ha podido ser adulterada, sino que «tienen un efecto disuasorio», aseguró Jiménez, junto al fundador de Aglaya, Abel Lafuente, quien precisó que la idea de las pulseras surgió debido a haber sufrido una sumisión química hace dieciséis años.

Por otro lado, Lafuente explicó que la caducidad de las mismas es de «un año» y que son de un sólo uso. Sobre su funcionamiento, indicó que para realizar la prueba se debe mojar el dedo en la bebida que se esté consumiendo y mojar los dos apartados de los test. El primero puede detectar más de 22 drogas diferentes, que se basan en animas como ketamina, LSD o burundanga, mientras que el segundo unicamente avisa si existe GHB, conocido como éxtasis líquido.

Los resultados se obtienen en un periodo de entre 3 y 5 segundos. Si en el test 1, el círculo se pone de un color naranja, es que hay presencia de drogas en la bebida. En el test 2, si el apartado se pone de color azul, supone que hay presencia de GHB. La pulsera contiene además un QR. En caso de escanearlo, lo primero que aparecen son los resultados de los test, ya sean negativos o positivos, y un menú de botones. Entre ellos se encuentran, el 'pulsador' de llamada a emergencias, ya que la pulsera geolocaliza al usuario y facilita el número de emergencias del país en el que se encuentra. A continuación, se encuentra el botón de geolocalización, mediante el cual se puede compartir la ubicación con cualquier contacto del móvil.