El 'botafumeiro' riojano vuelve a volar

El 'botafumeiro' riojano volvió a volar ayer en la iglesia de la Asunción de Navarrete. El incensario, que durante las obras de la catedral de Santiago de Compostela años atrás fue el único que voló a lo largo del Camino de Santiago, volvió a izarse ayer tras la misa vespertina, en presencia de una veintena de peregrinos de la Ruta Jacobea, así como de cientos de vecinos, devotos y turistas que acudieron a presenciar el espectacular vuelo en medio de la iglesia.

Durante la misa, el párroco de Navarrete, Armando Lasanta Moreno, ofreció un sermón sobre el concepto de autoridad. «La autoridad es una ocasión para servir. El que quiera ser el primero, que está bien, que no utilice su crecimiento para humillar a los demás, sino para ayudar a otros a crecer», advirtió el sacerdote, poniendo como ejemplo de crecimiento personal a Jesucristo.

Solo dos días al año se eleva el incensario central en la iglesia de Navarrete. Uno es el día del apóstol Santiago, patrón de España, que se celebraba ayer. El otro es en la fiesta de San Ignacio, que se celebrará el próximo domingo, 31 de julio, y se hará tras la misa de las 19.30 horas. Y es que en Navarrete, por la propia calle Mayor en la que se encuentra el templo, confluyen tanto el Camino de Santiago como el Ignaciano.

La misa de ayer contó con la presencia del obispo de la diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño, Santos Montoya, quien bendijo a los peregrinos presentes. Fue un grupo de caminantes quienes tuvieron el honor de disponer el incienso sobre el recipiente antes de su izado. Desde la parroquia se recordó que el incienso es un símbolo del respeto por el apóstol, de ofrenda de los creyentes hacia Dios y que debe mover hacia la caridad, perfumando el templo.