Cartas a la directora

Negacionismo

Lucía Gómez Valgañón

Viernes, 26 de septiembre 2025, 22:02

Negacionismo siempre ha tenido un significado peyorativo y acusatorio para aquellos que se han obstinado en rechazar lo evidente. Ejemplo histórico lo encontramos en quienes, ... a la vez que exhibían su odio hacia el pueblo hebreo, insistían en refutar la existencia del Holocausto cometido por sus admirados nazis. Y eso a pesar de las irrefutables pruebas mostradas por los soviéticos tras la liberación de Auschwitz, o las registradas por orden del general Eisenhower, que hizo desfilar a sus tropas y a civiles alemanes frente a los montones de cadáveres encontrados en Ohrdruf como recuerdo. Hoy también encontramos negacionismo del genocidio perpetrado contra el pueblo palestino por parte de los matarifes del gobierno israelí, quien a pesar de las abrumadoras evidencias gráficas existentes, o incluso de las declaraciones emitidas por ellos mismos sobre su intención de erradicar a esos «animales humanos», como los llamó Yoav Gallant, se obstinan en negarlo. No, el gobierno español no debiera caer en la autocomplacencia respecto al papel jugado. Dispone de la competencia para impulsar la tipificación penal de la negación del holocausto palestino, o del apología de la doctrina que lo anima. España también llega tarde. El reconocimiento de Palestina como nación debiera haberse producido hace décadas. Igualmente, porque la implicación con la ocupación sionista en forma de suministro de armas, o el encubrimiento político de los continuados crímenes, nunca debiera haber sucedido.

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