Logroño inicia una campaña para insistir en que no se orine ni se vocifere en la calle
El concejal Iglesias no descarta, en última instancia, modificar ordenanzas para prohibir, en lo posible, las despedidas de solteros
La campaña contra comportamiento incívicos sumará estos días un nuevo elemento en forma de cartelería con el lema 'No hagas en la calle lo que ... no harías en casa' y con recuerdo de las sanciones que implica tanto vociferar (200 euros) como orinar en la vía pública (300 euros).
No en vano, desde principio de año, los agentes de la Policía Local han puesto un total de 786 denuncias por conductas contrarias a las ordenanzas municipales de convivenciam limpieza, ruido y tenencia de aniumales y, de ellas, 525 han sido por miccionar en la calle, otras 105 por ruidos en domicilios y merenderos y 36 más por vociferar o usar megáfonos.
La cartelería, con el fondo rojo que remite a la prohibición -han señalado los concejales Francisco Iglesias y Jesús López-, muestra las conductas indeseadas y el importe de la multa por llevarlas a la práctica.
López, responsable de Medio Ambiente, ha explicitado además los cambios ya en marcha en el sistema de recogida de residuos puerta a puerta que se lleva a cabo en el centro histórico para hostelería y comercio y que hasta ahora propiciaba imágenes de bolsas y cartones por las distintas calles por la mañana.
Desde este lunes, la recogida que se venía llevando a cabo de 06.00 a 10.00 horas se ha adelantado y se realiza de 02.00 a 06.00, de manera que a primera hora de la mañana las calles ya luzcan recogidas.
Iglesias ha indicado que todos los fines de semana se vienen produciendo situaciones de sanción a despedidas de solteros, buena parte de ellas relacionadas con voces y ruido, pero también con menosprecio y resistencia a la autoridad.
El concejal ha destacado que en esta primera fase de intervención se entiende que será suficiente, para atajar las situaciones indeseadas relacionadas con el ocio que se están dando, las medidas didácticas y sancionadores, si bien no ha descartado, en el caso de que se precise, acudir a otras más drásticas.
El ejemplo que ha puesto ha sido el de León, a cuyos límites aún no se acerca la capital riojana, ha dicho, que está cambiando ordenanzas para prohibir, dentro de lo posible, las despedidas. «Hay formas de ocio que no benefician sino que perjudican a la ciudad».
Por fin, ha mostrado su intención de aplicar «firmeza con quienes no cumplan las ordenanzas», en este caso ya hablando de forma más amplia, aludiendo a particulares, pero también a negocios, «La impunidad no existe. Mantenemos el discurso de quien la hace la paga».
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