La vacuna que protege antes de nacer

La tosferina es una enfermedad bacteriana que provoca una infección respiratoria; en adultos puede pasar por poco más que en un resfriado grave, sin embargo, resulta altamente peligrosa en los primeros meses de vida, pudiendo requerir hospitalización. Incluso se han dado en los últimos años casos de muertes de bebés no inmunizados. Tradicionalmente, la vacuna de la tosferina, junto a la difteria y el tétanos, se inoculaba por primera vez a los dos meses de vida. Posteriormente, según el calendario de vacunación riojano, a los cuatro y once meses, los pequeños reciben nuevas dosis. Desde 2015, la vacuna se adelanta antes incluso del nacimiento, y es que las embarazadas la reciben dentro de la atención rutinaria del embarazo que realizan las matronas, entre la semana 27 y 36 de gestación.

«Empezó a recomendarse por un aumento de casos de tosferina en lactantes en las primeras semanas de vida. Son niños que sufren la enfermedad de forma grave y no se les puede vacunar antes de los dos meses, por lo que se vio que vacunando a las madres se produce un paso de anticuerpos a través de la placenta para proteger al bebé», señala Eva Martínez Ochoa, directora general de Salud Pública de La Rioja. Esta vacuna se incorporó con éxito y es que las coberturas siempre se mantienen por encima del 95%, más que la media nacional. «Existe una alta concienciación con respecto a esta vacuna, el mensaje de los sanitarios es claro y hay una buena respuesta por parte de las embarazadas», comenta Martínez Ochoa.

Precisamente, este año los casos de tosferina están disparados en la región, con 59 afecciones registradas hasta comienzos de este mes, algo que choca bastante con ejercicios previos. En 2023 se detectaron trece casos de tosferina, y en los dos anteriores solamente uno. «Antes de la pandemia también hubo incluso más casos de los que hay ahora y es que es una enfermedad que se comporta en forma de ondas epidémicas, cada cuatro o cinco años hay un aumento que después va bajando. Esto se sintió en La Rioja también entre 2015 y 2017», explica la directora general de Salud Pública, que subraya que «lo más importante es que no está afectando a lactantes, es a ellos a los que más hay que proteger y ese es el objetivo de la vacunación a embarazadas».

Debido al actual repunte, organismos como la Asociación Española de Pediatría han insistido en la importancia de esta medida. Además, un estudio reciente del Instituto de Salud Carlos III reveló que desde la inclusión de la vacuna en el embarazo, la hospitalización de lactantes menores de dos meses se había reducido a la mitad, así como el tiempo medio que permanecían ingresados.