Un cuatrero en el Camero Nuevo
La Guardia Civil recupera seis de las nueve vacas robadas en Pradillo, vendidas a un ganadero del Bajo Iregua con crotales y documentación falsa
La Guardia Civil investiga a un ganadero de 53 años residente en La Rioja como presunto autor de los delitos de hurto, falsedad documental y estafa. La operación, enmarcada en el plan contra las sustracciones en explotaciones agrícolas y ganaderas, se inició a mediados del pasado mes de mayo, cuando un ganadero riojano que tenía su ganado pastando en los montes de Pradillo, detectó la falta de siete vacas y dos terneros de un cabaña, por lo que procedió a denunciar la desaparición de los animales en el cuartel de Torrecilla en Cameros.
Con la información aportada por el denunciante sobre los animales, y que la Guardia Civil juzga «de gran valor», agentes de Torrecilla en Cameros y del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) abrieron diferentes líneas de actuación. La primera de ellas fue la búsqueda de evidencias en la zona de pasto del ganado desaparecido y la segunda se centró en el análisis de diferente documentación relacionada con el sacrificio, nacimientos, compras y ventas de ganado vacuno recientemente en la zona.
La Guardia Civil investiga a un ganadero de 53 años como presunto autor de delitos de hurto, falsedad documental y estafa
Como resultado de esta investigación, los agentes, acompañados del ganadero de Pradillo, se trasladaron hasta una explotación ganadera del Bajo Iregua, donde, tras examinar más de un centenar de cabezas de ganado, el denunciante pudo identificar como de su propiedad a seis de las nueve vacas que le habían sido sustraídas. Tal y como informa la Guardia Civil, «presuntamente, el ahora investigado sustrajo las cabezas de ganado, les sustituyó los crotales (la pieza de plástico con la que se identifica de forma individual a cada animal) y los Documentos de Identificación de Bovinos (DIB) para hacer pasar a las reses como animales de su propiedad y poder venderlas, mediante engaño, por 600 euros cada una a la explotación ganadera en la que fueron halladas», alrededor de dos y hasta tres veces menos que su valor habitual en el mercado.
Por el momento se desconoce el paradero de los otros tres animales sustraídos, pero las seis vacas localizadas han quedado depositadas en la explotación agrícola donde fueron halladas, a disposición de la Autoridad Judicial. No es la primera vez que el Seprona interviene en un caso de robo de ganado, hace un año recuperó en Viana 67 ovejas sustraídas en Laguardia y Agoncillo e investigó a un vecino de Leza de Río Leza como presunto autor de un delito de hurto de un rebaño de cabras en San Asensio.
