Los sindicatos alertan de que el problema es estructural, no coyuntural»

«Puede que ahora haya bajado un poquito la presión asistencial, pero puede volver a subir la próxima semana, la situación no está superada. En el hospital la situación sigue siendo de saturación, tanto en Urgencias como en planta, porque no hay que olvidar que el plan de contingencia no es un plan real porque consiste en que los profesionales que están trabajen el doble. Lo mejor que tiene el Seris son sus trabajadores y lo peor, sus gestores, que siguen apretando las tuercas a los que están saturados y extenuados», defiende José Manuel Forcada, cardiólogo y uno de los responsables de Sanidad de la CSIF.

«Se han duplicado camas, pero los médicos siguen siendo los mismos y solo se ha añadido una enfermera y una auxiliar de Enfermería más, que tampoco es suficiente y que, además, las han sacado de otro sitio», asevera, para incidir en que «los médicos deben atender al doble de pacientes y todo eso gratis y ya que es así, al menos que se sepa».

«El pico ha pasado, pero es que el problema no es coyuntural, sino estructural, porque en condiciones normales estamos trabajando ya al 90% de actividad y ocupación. Hace falta más personal, más hospital y más presupuesto. Esto sale adelante por los profesionales, pero ya estamos agotados y derrotados», concluye.

La también médico y vicepresidenta del sindicato CESM La Rioja, Miren Romero, advierte, por su parte, de que «lo fundamental aquí es la Atención Primaria y la falta de inversión desde hace muchos años, porque esto no viene de la pandemia, sino de las bajas de los médicos jubilados que ya se sabía que se iban a producir. Ha habido ausencia de planificación».

Y se explica: «La Primaria es medicina familiar y comunitaria y de prevención, pero si esta no funciona, pues el resto tampoco. Si tú no detectas, por ejemplo, hipertensiones y arterioesclerosis en fumadores, eso se convierte en infartos que acaban en el hospital y en enfermos crónicos».

«Estamos invirtiendo más en lo estético hospitalario, pero si a la Primaria no la dotas de recursos se satura todo lo demás porque es un eslabón de la cadena», denuncia, para coincidir en que «hay una infradimensión de las plantillas y falta tiempo para formación para los profesionales y los futuros especialistas. Solo se valora la cantidad, cuando nosotros lo que exigimos es poder proporcionar la atención de calidad que necesita un paciente en una región, además, en la que la población está muy envejecida y muchos enfermos necesitan más tiempo».

«Sí que nos consta que la urgencia está con muchísima actividad, pero no con la saturación de hace quince días, y lo mismo en planta, donde ya no hay habitaciones dobladas, salvo en Medicina Interna», admite Marta Sáenz-Torre, secretaria autonómica de SATSE, quien, aclara, no obstante, que «el problema es que la sobresaturación de trabajo en los profesionales no ha cesado, porque es un hospital cada vez de más agudos y trabajo hay siempre muchísimo. Nosotros como principal demanda es que cuando se doblan las habitaciones sí se refuerza el personal de Enfermería, pero lo deseable es que se mantuviera ese refuerzo porque es inasumible que una sola enfermera atienda a 20 o 23 pacientes, porque es una carga de trabajo exagerada».

Desde UGT, su responsable de Sanidad, Roberto Mendaza, asegura que «lo que nosotros esperamos es que para el próximo pico de demanda asistencial que haya, se ponga remedio antes, pero, sobre todo, lo que exigimos es que se tomen decisiones ya, porque el problema no es coyuntural, sino estructural».