Asegura tus vacaciones

Martes, 22 de julio 2025

Organizar unas vacaciones es de lo más emocionante. Entre buscar vuelos, reservar alojamientos, pensar en qué sitios visitar y soñar con ese descanso tan merecido, todo parece ir sobre ruedas. Pero, muchas veces, dejamos para el final o incluso pasamos por alto contratar un seguro de viaje. Y eso es un error.

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Tranquilidad médica en el extranjero

Uno de los motivos más importantes para contratar un seguro es, sin duda, la atención médica. Porque en muchos países, sobre todo fuera de Europa, ir al médico no es precisamente barato. Y si necesitas algo más que una aspirina, la factura puede ser muy elevada.

Tener un seguro de viaje te asegura que, si te pones enfermo, te atienden sin que tengas que preocuparte por cuánto te costará. Ya sea una gripe, un esguince o algo más complicado, te cubren desde el primer momento. Además, muchos ofrecen asistencia en español las 24 horas, lo que es especialmente útil cuando se está en un país donde no dominas el idioma local.

Cada tipo de viaje, con su seguro

No todos los viajes son iguales. No es lo mismo irte un fin de semana a Roma que lanzarte a hacer senderismo por los Andes o estudiar seis meses en otro país. Por suerte, existen seguros para todo tipo de planes, desde aventuras extremas hasta cruceros, viajes de negocios o estancias largas.

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Lo ideal es mirar bien qué coberturas tiene cada opción y elegir la que mejor encaje con tu tipo de viaje. Encontrar el mejor seguro de viaje no es solo una cuestión de precio, sino de lo que realmente te ofrece si todo se tuerce.

Cancelaciones, retrasos y más

Por muy bien que planifiques tu viaje, siempre puede surgir algo. Que si cancelan un vuelo, que si hay una huelga, que si ocurre algo personal y no puedes irte. Pero, ¿qué pasa con todo el dinero que ya has pagado? Con un buen seguro, dependiendo del tipo de póliza que contrates, pueden devolverte lo que ya habías pagado, o al menos una parte. Incluso si tu vuelo se retrasa, te cubren el hotel extra, las comidas o lo que necesites mientras esperas.

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Pérdida o robo de equipaje

A veces, llegas tú al destino… pero tu equipaje no. O peor, te lo roban mientras estás haciendo turismo. Son situaciones difíciles pero que pasan más a menudo de lo que imaginamos. Llevando un seguro de viaje, puedes recibir una compensación si te pierden o te roban la maleta. Y si se retrasa muchas horas, te reembolsan el dinero de la ropa o productos básicos que tengas que comprar mientras tanto.

Asistencia legal y responsabilidad civil

En ciertos destinos, podrías verte involucrado sin querer en un conflicto legal, como un accidente de tráfico con un coche de alquiler o un incidente menor con otros viajeros. Muchos seguros de viaje contemplan la asistencia legal básica e incluso la cobertura de responsabilidad civil, que puede ayudarte a enfrentar los costes derivados de estos contratiempos sin arriesgar tu patrimonio.

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Aunque este tipo de situaciones no son comunes, contar con respaldo legal puede evitarte procesos engorrosos o pagos inesperados si te encuentras en medio de una situación que no puedes resolver por ti mismo.

Un seguro no arruina el viaje, lo salva

Viajar es un placer. Pero también es verdad que no todo está bajo nuestro control. Un seguro de viaje es ese respaldo silencioso que está ahí si las cosas no salen como esperabas. No interfiere, no molesta… pero cuando lo necesitas, ahí está.

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Asegurar tus vacaciones debería ser tan básico como llevar el pasaporte. Así, viajas libre y tranquilo para disfrutar de verdad.

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