La Rioja convoca oposiciones a maestros, con 120 plazas de Infantil, Primaria y especialidades
En concreto se convocan 113 plazas de las que 40 son para Primaria, 31 para Educación Infantil, 17 para Pedagogía Terapéutica, 9 para Educación Física, 7 para Audición y Lenguaje, 5 para Música y 4 para Inglés
L.R.
Viernes, 4 de febrero 2022, 08:59
El Gobierno de La Rioja ha publicado esta mañana en el Boletín Oficial de La Rioja (BOR) la convocatoria de la Oposiciones para docentes para 2022, con un total de 120 plazas de Infantil, Primaria y especialidades. El plazo de presentación de solicitudes y de alegación de méritos por parte de los aspirantes será de 15 días hábiles comprendidos entre el 14 de febrero y el 4 de marzo, ambos incluidos.
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La oferta de 120 plazas (7 de ellas reservadas para quienes tengan la condición legal de personas con discapacidad) se va a repartir en 32 plazas de maestro en Infantil, 41 de Primaria, 5 de Inglés, 10 de Educación Física, 6 de Música, 18 de Pedagogía Terapéutica, 8 de Audición y Lenguaje.
A ellas se sumarán, en una próxima convocatoria, otras 4 plazas de Inspección Educativa. Tal y como indica la resolución publicada hoy en el BOR, las pruebas selectivas darán comienzo en la fecha que fije la Dirección General de Gestión Educativa, y que a falta de concretar de forma oficial, en cualquier caso no podrá ser anterior al 15 de junio de 2022.
El Ejecutivo convocó 196 plazas de Secundaria el año pasado, que se suman a estas 120 de Infantil, Primaria y especialidades, y pese a la situación sanitaria, que obligó de hecho en 2020 al aplazamiento de dichas oposiciones de Secundaria que se acabaron celebrando el pasado año, cuando se pudieron garantizar las condiciones de seguridad sanitaria de todos los participantes.
Sin estabilización
La convocatoria de este año ha estado rodeada de polémica a lo largo del país. El Ministerio de Educación impulsaba una reforma de la normativa para que esta cita sirviera como un proceso de estabilización del gran número de interinos que trabajan desde hace años en Educación.
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Eso hubiera supuesto que el primer examen, el más teórico, no fuera eliminatorio (para facilitar el pase de los que están trabajando y, por tanto, tienen menos posibilidades de estudiar el temario) y que los exámenes de programación didáctica fueran menos exigentes. Por contra, se aumentaría muchísimo el peso de la experiencia laboral en Educación, que pasaba a ser prácticamente decisiva en la obtención de plaza, minimizando de paso las posibilidades de los nuevos aspirantes.
Sin embargo, el cambio legislativo se ha ido retrasando, y hubiera supuesto una modificación radical de la convocatoria a ya muy pocos meses de los exámenes (previstos para junio). Así, la mayor parte de las comunidades, entre ellas La Rioja, ha decidido llevar adelante esta convocatoria con las normas tradicionales, dejando para otras citas ese proceso de estabilizacion, que además debería en principio estar acompañado de la salida de un número mucho mayor de plazas. Así han hecho de momento Asturias, Navarra, Cantabria y Madrid.
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