Beatriz Arraiz Nalda | Delegada del Gobierno en La Rioja

«A Javier se le va a seguir buscando hasta que aparezca. Lo aseguro»

A punto de cumplirse veinte días de la desaparición en Logroño del joven calceatense Javier Márquez Villaverde, y a pesar del trabajo de unidades especializadas como GEO y Tedax de la Policía Nacional y GEAS y GAR de Guardia Civil, además de drones y helicópteros, Policía Local y Bomberos, el judoca de 20 años continúa sin aparecer. La Policía Nacional dirige la investigación y el centro de coordinación de operaciones, puesto que la desaparición se produjo en la capital riojana y es su demarcación, con reuniones diarias con Policía Local, Protección Civil y Bomberos de Logroño, y comunicación continua con la Guardia Civil.

«Es una desaparición que ha generado mucho apoyo, en la que hay mucha gente, y hay una coordinación que dirige Policía Nacional, que son los profesionales que saben qué medios utilizar en cada momento. Por muy dispuesto que uno esté igual no es necesario», expone la delegada del Gobierno en La Rioja, Beatriz Arraiz, bajo cuya petición se celebra semanalmente otra reunión de trabajo sobre la desaparición a la que también asisten la Guardia Civil y miembros del Ayuntamiento de Logroño y del Gobierno de La Rioja.

Precisamente la gran movilización de voluntarios ha hecho que estos comprueben a diario las labores de búsqueda por parte de las fuerzas armadas y que surjan preguntas como por qué el día 5 el Grupo de Especialistas en Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GC), con sede en La Rioja, actuó en el Ebro, en la zona de las huertas del Iregua, al día siguiente empezara su labor en el río el Grupo Especial de Operaciones de Policía Nacional (PN), con sede en Guadalajara, y los primeros no han regresado a la capital a pesar de que los segundos no han actuado en ninguno de los dos fines de semana transcurridos. Y en ello aun cuando, en el último, el caudal había bajado, el agua estaba más mansa y la climatología era óptima.

«Guardia Civil, en su demarcación, actuará conforme lo vaya solicitando la Policía Nacional. Ellos buscan con otro tipo de equipos en su demarcación, tal y como le ha solicitado Policía Nacional. Si no se ha solicitado la presencia de medios subacuáticos de la Guardia Civil es porque no se ha considerado necesario. Igual llega un momento en que sí, pero eso lo determina la Policía Nacional», explica Beatriz Arraiz, quien subraya que se están empleando todos los medios necesarios por iniciativa de quien dirige la búsqueda. Eso no lo duda nadie y siempre lo agradece la familia, pero sí parece haber cierta disfunción cuando, por ejemplo, se emplea el helicóptero de la Policía Nacional de Aragón cuando la Guardia Civil cuenta con uno propio en La Rioja. «La Policía Nacional habrá contado con que eso es lo que necesitaba en ese momento y si necesitara el de Guardia Civil, lo solicitaría. Aquí lo importante es que se trabaje coordinadamente», afirma Arraiz.

«Si no se ha solicitado un medio concreto es porque no se ha considerado que correspondía en ese momento», remarca Arraiz. Quizá a pie de calle el ciudadano no es tan consciente de que la Guardia Civil no tiene competencia en Logroño ni la Policía Nacional fuera de la ciudad y se pueda cuestionar si, quizá, esto no produzca cierto celo entre los dos cuerpos por si uno 'pisa' el terreno del otro. Así, la Guardia Civil no ha vuelto a introducirse en Logroño desde el pasado día 5, centrando su búsqueda desde entonces en la zona de Agoncillo ni la Policía Nacional ha salido de Logroño. «No existe ese problema y, si existiera, yo sería la primera en negarme en redondo a que exista. En este caso en concreto no lo está habiendo, se está colaborando al máximo nivel. En la última reunión yo hice hincapié en este hecho y Policía y Guardia Civil coincidieron en que es necesario. No se mira la demarcación, pero se tiene que respetar para que haya cierto orden. Si se necesitan en un momento medios de Guardia Civil, porque los tiene mejores, y Policía Nacional se los pide para trabajar en su demarcación, se hará», asegura la delegada del Gobierno.

También se plantea la duda de por qué la Unidad Canina de Rescate no fue movilizada en las primeras horas de la desaparición, cuando podría haber sido más útil su ayuda. «Entiendo que si la Policía, en su momento, lo determinó, seguramente tiene una explicación objetiva», confía Arraiz.

Por otra parte están los voluntarios que a diario rastrean la ribera del Ebro una y otra vez, sin aparente coordinación ni supervisión policial. «Se les está orientando, sobre todo, en el entorno del río, que puede ser más peliagudo. Sí se está colaborando con ellos, aunque es verdad que es un movimiento muy espontáneo, que sale desde el corazón, y los familiares y amigos sienten la necesidad de buscarlo. Y esa colaboración ciudadana sirve y se agradece», explica Arraiz, apuntando a la posibilidad de poder contar con Protección Civil. «Todo es mejorable y la situación puede ser cambiante porque hay otras líneas de investigación que no se descartan», advierte Arraiz, quien admite que aún se barajan diferentes hipótesis, no solo la caída al Ebro.

«Se deja de tener conocimiento de dónde está Javier en el entorno en el que se está buscando más activamente, el Casco Antiguo y el río, por eso se hace especial hincapié o es la parte que más se ve, pero la Policía busca en el área donde se le pierde de vista», aclara Arraiz. E insiste en que «a Javier se le va a seguir buscando hasta que aparezca». «A lo mejor llega un momento en que todos los días no vemos buscando en el mismo sitio pero se le va a seguir buscando. Lo aseguro», concluye Arraiz.