La destilación de vinos se financiará a 86 céntimos en La Rioja y a 92 en Rioja Alavesa

Las normativas presentan también otros aspectos distintos, como que en el caso de la Comunidad riojana se exigirá a las bodegas que para poder acceder a las ayudas tendrán que garantizar compromisos de compra de uva para esta campaña con un mínimo de 68 céntimos por kilo, mientras que en la normativa vasca, al menos la avanzada hasta ahora, no hay ningún compromiso en ese sentido. Eso sí, el Ejecutivo de Urkullu ha excluido expresamente de la destilación a los vinos de las bodegas que en el año 2020 se beneficiaron de las ayudas al almacenamiento de vinos, cosa que no sucederá en La Rioja.

La consejera de Agricultura riojana, Noemí Manzanos, aseguró que el precio finalmente concretado de 86 céntimos para el litro de tinto ha sido «consensuado con el propio sector». Lo que se pretende es evitar posibles especulaciones, ya que quien finalmente solicite las ayudas tendrá que conformarse con la destilación como 'mal menor', ya que probablemente pierda dinero, pero menos que si recurriera al mercado libre, totalmente parado desde hace meses y con precios, en el caso de los escasos movimientos, incluso por debajo de 12 euros la cántara. La cifra de 0,86 céntimos por litro supone valorar la cántara (16 litros) en 13,76 euros y la esperanza del sector es que sirva, no sólo para eliminar los peores vinos, sino también para fijar cuando menos un suelo en el comercio interno de graneles.

Otro punto significativo de la orden riojana, que podría publicarse hoy o mañana en el BOR, es que se tramitará de forma exprés. En este sentido, las bodegas y cooperativas interesadas tendrán un plazo de cinco días desde su publicación para solicitar acogerse a las ayudas. La intención de la Consejería es resolver las demandas antes de finales de agosto para poder hacer efectiva la destilación incluso antes de comenzar el grueso de la vendimia y completar los pagos para noviembre.

El reparto de las ayudas se hará por concurrencia competitiva y, según anunció la consejera Manzanos, habrá criterios de proporcionalidad, aunque no los detalló a la espera de la letra pequeña de la orden pendiente de publicación. En cualquier caso, lo que no computará para destilación son aquellos vinos que no hayan sido transformados por las propias bodegas, es decir, adquisiciones de graneles, y se limitará a las elaboraciones de vino con uva comprada o propia en 2022.