Francia, un polvorín, pese al aval constitucional a su reforma de pensiones
Macron no cede y los sindicatos intentan mantener el pulso en las calles
Francia sigue viviendo sobre un polvorín, pese a la decisión del Consejo Constitucional de avalar la controvertida reforma de las pensiones impulsada por el presidente ... Emmanuel Macron. El futuro de este proyecto, que fija la edad de jubilación en 64 años, dos más que ahora, estaba en sus manos y los nueve miembros de este órgano refrendaron el plan, que ha dado lugar a jornadas de manifestaciones y disturbios en todo el país, dictaminando que es conforme o no a la Constitución gala.
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Este grupo de 'sabios' evaluó la constitucionalidad de los artículos de la reforma y analizó también sobre el vehículo legislativo empleado por el Gobierno francés en este proyecto. Había varios escenarios posibles para el veredicto del Consejo Constitucional: una censura del conjunto del texto, la validación de la ley o, la opción más probable, el veto parcial de la reforma.
Cuatro meses en las calles
Los franceses han tomado las calles para decir una vez más no al proyecto de Macron, exigir la retirada del texto y presionar al Consejo Constitucional para que tumbe la ley. Las protestas comenzaron el pasado 19 de enero y, según cifras oficiales, ha habido movilizaciones que han congregado a 570.000 manifestantes, aunque los sindicatos hablan de hasta dos millones.
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