Coloma y García renuncian a la clasificación para favorecer su recuperación

«El Short Track es un calentón», decía estos días el ciclista del Albelda de Iregua. Un subidón de adrenalina que apenas dura veinte minutos, que castiga mucho los cuerpos, pero que garantiza salir entre los cuarenta primeros.

Tal y como presumían los dos integrantes del BH, La Rioja Bike Race ha dejado su recuerdo aunque ha reportado puntos en la lista UCI. Ambos se enfrentan a un trazado duro, exigente, con mucha subida, pero también rápido, como quedó patente ayer. Con esta decisión, tanto Coloma como García saldrán desde la mitad de la parrilla, con muchos corredores por delante, por lo que progresar será más difícil, aunque todo dependerá de las piernas.

La clasificación evidenció que se va muy rápido. Nueve vueltas al trazado, aunque acotado. Nino Schurter y Henrique Avancini controlaron el ritmo del pelotón masculino, sobre todo el suizo que es un experto tanto en mandar desde la primera plaza como controlar desde fuera de ella. El campeón brasileño fue durante muchos minutos líder, pero superado el ecuador de la carrera apareció en escena Lars Forster, que tensó el ritmo. Van der Poel, ganador de La Rioja Bike Race en el año 2018, apareció entre esas primeras plazas en la séptima vuelta (de las nueve programadas). La última fue una pugna entre Forster y Van der Poel con el suizo como espectador de lujo. El holandés cambió de ritmo a falta de doscientos metros, se colocó primero y venció al esprint. No es la primera vez que gana, aunque luego su comportamiento no es tan bueno en carrera.

En féminas, carrera en la que no participó Rocío García, la norteamericana Kate Courtney honró al maillot arcoíris que viste y superó en la línea de meta a la suiza Yolanda Neff, que no pudo estrenarse con el Trek con un 'pole'. Entró a dos segundos de su rival, pero sigue siendo la gran favorita para ganar en Albstadt.