Balonmano | Liga Guerreras

Sonrisas y lágrimas en el Grafometal

El Sporting La Rioja quiso despedir a sus jugadoras con un detalle y una a una fueron pasando para recibir un ramo de flores, una botella de vino y la ovación del Palacio de los Deportes de Logroño. Lydia Blanco, Karol Lewandowski, Sara Molés, Érica Tavares, Marina González. Y a continuación, turno para las que abandonan el balonmano en activo. La primera en recibir la ovación del público fue Alba Sánchez, que a partir de ahora se centra en l Psicología.

Mención aparte para Silvia Ederra. «Se va una jugadoras y nace una leyenda», comentó Luisja en la megafonía. Nada más que añadir para despedir a la pivote navarra.

Las dos últimas despedidas fueron para las dos jugadoras que más tiempo llevan en la plantilla verdeamarilla. Carla Rivas, Choco, que llegó en la temporada 2017-18 y deja un capítulo importante en el libro de la historia del Sporting La Rioja.

El último baile fue para Taty Lozano, la reina de la defensa, que regresa a su León natal para seguir con su vida. La rodilla le piden parar y pensar en otras cosas. Aunque siempre con un corazón verdeamarillo.

Además de todo esto, antes se jugó un partido de balonmano en el Palacio de los Deportes. Con el único aliciente de la honra en juego, Grafometal y Motivemarket.com Gijón cumplieron con el expediente y jugaron sesenta minutos de guante blanco para despedir la temporada.

La primera parte fue de color verdeamarillo. El Grafometal siempre fue por delante en el marcador y Luismi aprovechó la ocasión especial para rotar a todas sus jugadoras. Marina y Geandra, con problemas físicos, animaron a sus compañeras desde la grada.

Partido roto

En lo deportivo, el primer cuarto de hora estuvo igualado, pero el Grafometal le dio una vuelta de tuerca a la defensa, corrió al contragolpe y rompió el partido para marcharse al descanso con siete goles de renta (16-9).

En la segunda parte continuó el carrusel de cambios en ambos equipos para repartir esfuerzos tras una larga temporada y para que las jugadoras que se despedían del Palacio tuvieran su ocasión de hacerlo sobre la pista.

En lo deportivo no cambió la decoración de la primera mitad. Se impuso la defensa verdeamarilla y estuvo bien bajo palos Maitane, lo que permitió a las de Ascorbe correr y anotar goles fáciles.

Hubo goles de todas las facturas: de seis metros, de lanzamiento exterior, de penetración... Así, el marcador se fue ampliando mientras los dos banquillos esperaban a que terminara el partido para pensar en la siguiente temporada.

Luismi Ascorbe cerró el partido con siete jugadoras de campo que se marchaban de Logroño: Carla, Karol, Alba, Sara, Lydya, Taty y Ederra. Gol final de la leonesa. Al final, victoria local por un contundente 32-18 que permite al Grafometal terminar la campaña con una sonrisa... previa a las lágrimas finales.