El influyente legado aportado por The Beatles a la historia musical del pop y rock bulle sin parar porque su carisma es continuamente canonizado por ... sus innumerables incondicionales. Prueba de ello es el documental 'Paul McCartney get back' (1991), que se proyecta, a partir de las 19.30, en la sede de la Filmoteca Rafael Azcona.
Se trata de una impecable recopilación de canciones grabadas durante la gira mundial de Paul McCartney a finales de los ochenta y la vuelta del bajista zurdo, que promocionaba su último álbum en estudio, 'Flowers in the dirt', a los grandes espectáculos multitudinarios de luz y sonido. El abundante material ha sido editado por el cineasta norteamericano, Richard Lester, una de las personas que mejor conoció al famoso cuarteto de Liverpool.
El dinámico trabajo del célebre realizador consiste en montar imágenes de los temas interpretados por McCartney y sus músicos, entre los que se encuentra su mujer, Linda, extraídos de las actuaciones en diversos escenarios, Tokio, Nueva York, Chicago, etcétera, y apuntalar un documento que rememora la conexión entre la estrella y un público no entregado, sino extasiado.
Pero no se trata del típico concierto grabado en directo. Su impronta y el esfuerzo en la mesa de montaje cabe valorarlo en su justa medida. Prueba de ello es el maridaje de registros que propone Lester, un cineasta juguetón con el dispositivo visual. Algunas canciones van acompañadas de escenas de películas en la que los componentes del grupo participaron como actores.
Las piezas de Wings se intercalan con la de The Beatles, pero cuando suena, 'Let it be', emblemático himno del cuarteto, la película alcanza su cima, con Paul al piano, fundiéndose los últimos acordes de su interpretación con la foto de John Lenon tomada en España cuando rodó en tierras almerienses 'Cómo gané la guerra' (1967).
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