Alto Najerilla

El TSJR anula la normativa de protección y limitación del parque natural Alto Najerilla

La sentencia se basa en que «no se ha seguido el trámite de audiencia a los interesados previsto en la ley de Conservación de Espacios Naturales de La Rioja» sino que, tal y como justificó el Ejecutivo, se siguió el trámite de la normativa del Régimen Jurídico del Sector Público.

El parque natural del Alto Najerilla se aprobó a finales del 2022 englobando el territorio de las Siete Villas (Brieva, Canales, Mansilla, Ventrosa, Villavelayo y Las Viniegras), en total 45.111 hectáreas, desde el monasterio de Valvanera, el San Lorenzo y Peña Hincada hasta Soria y Burgos. La normativa, además de limitar el uso del suelo, permitía preservar especies de flora amenazada, como el laurel de Portugal, el grosellero de roca y la androsela riojana; y animales en peligro de extinción, como el buitre negro, el quebrantahuesos y el alimoche.

Un defecto de forma en la tramitación ha tumbado el plan de ordenación del Alto Najerilla. La sentencia expone que la ley autonómica de conservación de parques naturales exige la audiencia a los interesados, «y tal circunstancia no queda exonerada por el cumplimiento del procedimiento legalmente establecido para las disposiciones de carácter general». La condición de propietario de fincas dentro del parque natural Alto Najerilla de Juan Carlos Morcillo lo convierte en «interesado» en el trámite legal y administrativo de la aprobación del decreto, por lo que podía tener interés en presentar alegaciones debido a las limitaciones que para el uso del terreno comporta la aprobación del plan de ordenación de recursos naturales. Y no pudo hacerlo.

Por tanto, se ha estimado el recurso y se anula el decreto que rige el parque natural Alto Najerilla, no haciéndolo desaparecer pero sí vaciándolo de contenido. «No ha habido a lo largo de todo el procedimiento ningún momento para hacer alegaciones al proyecto por parte de los interesados directos, aunque sí se escuchó a instituciones públicas y asociaciones», explica Morcillo, censado en Villavelayo, pueblo en el que nació y en el que posee fincas rústicas con nogales. «Se decidió prescindir del procedimiento porque urgía aprobar el decreto, al acabar la legislatura, sin emplazar a los interesados. Y a los alcaldes se les engañó instando a aprobar en los plenos la viabilidad del proyecto cuando lo que se aprovechó fue para iniciar los trámites», declara Morcillo.