Derribo del edificio de Correos de Cervera del Río Alhama

El Ayuntamiento de Cervera del Río Alhama adjudicó la demolición y desescombro a Excavaciones y Demoliciones Cruz del Río S. L. por 23.100 euros más IVA.

Los trabajos durarán poco y está previsto que finalicen a lo largo de la semana.

Por el momento se desconoce el uso que se dará al solar resultante, en la Plaza Escultor Daniel.

En 2011 el Tribunal Supremo condenó al Consistorio cerverano a hacerse cargo de los daños que sufría la casa (problemas de cimentación, al estar junto al cauce del río Alhama) y también tuvo que pagar las costas del proceso judicial. Los propietarios de los cuatro pisos y dos bajeras habían llevado la situación a los tribunales. Denunciaron en principio al arquitecto, al constructor y al Ayuntamiento como promotor. Posteriormente los juicios se centraron en este último hasta que llegó la sentencia definitiva del Tribunal Supremo.

Para cumplir la sentencia el ejecutivo local tuvo que comprar a los dueños la casa. Los residentes debieron trasladarse a vivir a otros lugares del pueblo y la oficina de Correos se ubicó en un bajo de enfrente.

Por entonces el alcalde de Cervera era José Luis Sanz y explicó que esta promoción municipal databa de los años 1982-1984 y que se había llegado a un acuerdo con los propietarios para hacerse con el inmueble. Más adelante verían que hacer con él. Para poder financiar la compra el Ayuntamiento tuvo que solicitar un préstamo y en el presupuesto general aprobado en 2011 se incluyeron 850.000 euros.

Ese mismo año los vecinos afectados solicitaron a través de su abogado, en el Juzgado de Primera Instancia e instrucción de Calahorra, el embargo de varios solares municipales como naves, viviendas incluso la plaza de toros. Tomaron esta medida para que el Consistorio hiciese frente a la sentencia de la Sala de lo Civil del Tribunal Supremo que lo había condenado a derribar el edificio y reconstruirlo en el mismo solar o en otro a satisfacción de los demandantes. Debía entregar las viviendas y locales en las mismas condiciones. Para evitar el enorme gasto que esto supondría se acordó con los inquilinos de los cuatro pisos el pago de 130.000 euros, mientras los titulares de los bajos continuaban negociando la indemnización. La petición de embargar los bienes municipales vino a consecuencia de no cumplirse los plazos de los pagos, algo que finalmente se solucionó.

Han pasado más de doce años y por fin se ha procedido a su derribo.

Ayer los cerveranos se acercaban hasta las inmediaciones de la zona de seguridad y recordaban que antiguamente en este espacio del pueblo estaba el lavadero.

El inmueble municipal derribado albergó varias aulas del colegio Escultor Daniel antes de ampliarse para la promoción pública de viviendas.