El tirón del Carnaval del Vino
Las 600 entradas puestas a la venta en Haro para las dos sesiones se agotaron en media hora
Cristina Valderrama
Miércoles, 8 de febrero 2017, 10:44
El Carnaval del Vino va camino de completar el aforo para las dos sesiones que se celebrarán los días 24 y 25 de febrero en el claustro del Hotel Los Agustinos de Haro. Al menos las 300 entradas que salieron a la venta para cada uno de los dos días en la Oficina de Turismo jarrera se agotaron en media hora. Los primeros de la cola llegaron a la puerta del palacio de Bendaña a las 6.45 horas, un madrugón que les valió la recompensa de ser los primeros.
Las puertas de la Oficina de Turismo las abrieron a las 10 horas en punto y para esa hora, la fila de la gente que aguardaba para comprar sus entradas llegaba hasta pasada la puerta del museo del Torréon. Este año, el precio ha subido a 25 euros por entrada y se podían comprar un máximo de dos por persona.
Y a las 10.30 horas, ya no quedaba gente aguardando en la calle ni tampoco entradas. Las disponibles para el sábado fueron las primeras en agotarse y las pocas que quedaron para el viernes, a las once ya estaban vendidas también.
El aforo para cada uno de los dos días es de 600 personas y aún quedan entradas a la venta. En Haro se ha agotado el cupo de 600 entradas mientras, que en Logroño de las 300 aún queda alguna disponible.
El pasado viernes también salieron otras 150 para cada día dentro de un paquete turístico con alojamiento incluido, a un precio mínimo de 71 euros, a través del portal de la agencia Unit Viajes.
Los que se han quedado sin entrada aún tienen una última posibilidad, ya que el próximo 11 de febrero saldrán a la venta en Atrápalo las que no se hayan vendido del paquete turístico.
El Carnaval del Vino es una iniciativa que se puso en marcha en el año 2010 para presentar las nuevas añadas de la bodegas de Haro. Una puesta de largo con los vinos jarreros como principales protagonistas. Y para adornar su presentación, este año el espectáculo se centrará en los oficios medievales. Es recomendable acudir disfrazado y la entrada incluye un vino de cada una de las catorce bodegas y cuatro pinchos.