Nueva campaña arqueológica en el castillo de Nalda
Se realizarán acciones de consolidación en este emplazamiento, así como excavaciones para completar el perímetro de la edificación
EFE
Lunes, 23 de febrero 2015, 16:29
Una nueva campaña arqueológica se llevará a cabo en el sector este del castillo de Nalda, en el que aún no se ha podido intervenir, así como se realizarán acciones de consolidación en este emplazamiento, cuyos orígenes se remontan al siglo XIII.
El consejero de Cultura, Abel Bayo, lo ha anunciado este lunes junto al alcalde del municipio, Daniel Osés. La Consejería de Cultura financiará esta intervención en el castillo de esta localidad, con una inversión de 47.853 euros.
Las actuaciones se desarrollará en el sector este del conjunto arqueológico, un espacio en el que aún no se ha podido intervenir por la espesa capa vegetal que lo inunda, pero donde se observan abundantes restos de estructuras de difícil definición, según el consejero.
La actuación centrará las excavaciones en completar el perímetro del castillo, definir toda esta cara del cerro y llegar a conectarla con la torre noreste.
Eliminar la vegetación
"Se trata de una zona con abundante vegetación, que será eliminada para permitir que las estructuras afloren", ha indicado Bayo, quien ha añadido que está en acusada pendiente, por lo que se prevé excavar en sentido descendente y crear plataformas artificiales que faciliten el trabajo.
En el frente norte se han identificado dos estructuras paralelas, una formada por un muro contraterreno de mampostería y mortero de cal con escasa altura 80 centímetros; y otra más interior, que está compuesta entre dos torreones y tiene cinco contrafuertes que dividen el muro en seis paños.
También ha dicho que, para consolidar y conservar adecuadamente la estructura, se proyecta la reconstrucción de la hoja exterior de los contrafuertes y paños murarios, así como recalce de lienzos y coronación de las estructuras y del muro exterior.
Para ello, se realizarán análisis de los morteros, limpiezas superficial de los contrafuertes, reconstrucción de la hoja exterior desmantelada, seguimiento de las huellas dejadas en el relleno y que todavía se pueden apreciar.
Las estructuras
Osés ha aludido a la intervención en el entorno del torreón noroeste, donde confluyen un buen número de estructuras que todavía no han podido ser fechadas de forma fehaciente.
En esta zona, se trabajará en el interior y el exterior de la estructura, ha añadido el alcalde de Nalda, donde, en la campaña arqueológica de 2011, se llevó a cabo un sondeo en esta zona.
Sin embargo, a pocos centímetros de la superficie comenzaron a aparecer las estructuras que delimitaban el lateral este, por lo que la excavación se centró en la parte exterior y quedaron los estratos interiores prácticamente sin tocar, que fue lo mismo que ocurrió en la lateral norte.
En la tercera campaña se vaciaron con medios mecánicos todos los estratos que ocultaban el exterior del frente norte y quedaron intactos los arqueológicamente fértiles.
También se efectuaron sondeos entre los contrafuertes uno y dos, donde se localizó un desagüe; y el entorno a la torre noroeste, de la que solo se conserva el alma del muro.
Esta última actuación permitió identificar la zanja de robo de la camisa exterior de sillería, su zanja de cimentación y un potente muro que fue cortado por el torreón y que en la actualidad está oculto por un paquete estratigráfico.
Interior y exterior
En el interior se plantea la excavación de la estratigrafía existente en un espacio que abarque el muro oeste, la torre noroeste, el primer contrafuerte, parte del segundo contrafuerte, los lienzos intermedios y un pequeño tramo del muro realizado con encofrado de cal y canto, del que ahora se ve su coronación desde el contrafuerte uno hasta más allá del cuarto.
Bayo ha explicado que poco se puede decir de la estratigrafía que se pueda establecer en este espacio, más allá de que parece estar cortada por la mayoría de las estructuras y que, previsiblemente, presente una fuerte pendiente hacia el norte.
Por el exterior se excavarán las mismas estructuras, excepto los paños intermedios, que ya se han quedado colgados; y habría que añadir el desagüe, el muro cortado por la torre noroeste y probablemente se pueda localizar la prolongación del muro en talud que se sitúa frente al lienzo principal.
Registro e inventario
Durante el desarrollo de ambos proyecto, la información será registrada y los materiales recuperados serán analizados e inventariados y no se descarta llevar a cabo análisis de Carbono 14, si fuera necesario, según el consejero, quien ha afirmado que todo el material recuperado será depositado en el Museo de La Rioja.
El castillo de Nalda, ha recordado, es una ubicación estratégica en el Valle del Iregua y sus primeras referencias se encuentran en las crónicas del rey Fernando IV en 1299, aunque parece probable que el castillo sea anterior a esa fecha.
El castillo, que llegó a ser sede principal del Señorío de los Cameros entre los siglos XIV y XIX, desapareció a partir del siglo XIX; y la zona donde se encuentran las ruinas estaba abandonada hasta finales de 2012.
El Gobierno de La Rioja desarrolló una primera y segunda fase de trabajos arqueológicos, financiados en el marco del enfoque Leader, dentro del Programa de Desarrollo Rural de La Rioja, que tiene como fin fomentar el desarrollo de los núcleos rurales para mejorar la calidad de vida de los vecinos y ofrecer nuevas alternativas socioeconómicas en estas poblaciones.
Estos trabajos, cuya inversión ascendió a 236.375 euros, permitieron estudiar el emplazamiento del castillo, delimitar las dimensiones de la fortaleza y trazar un camino de acceso.
También se restauraron materiales arqueológicos, se realizaron trabajos topográficos y diversas actuaciones de adecuación del entorno, como el acondicionamiento del acceso, el mirador al valle del Iregua, el ajardinamiento, el mobiliario urbano, el alumbrado y los paneles de difusión y divulgación del conjunto medieval.