Estudiantes del curso de verano de Lengua y Cultura Españolas junto a profesores y organizadores en la paella de despedida Juan Marín
Universidad de La Rioja

Paellada para graduarse como estudiante de español

61 estudiantes extranjeros han disfrutado de un mes en Logroño dedicados a aprender la lengua y cultura españolas

Alicia Fernández de Arcaya

Jueves, 24 de julio 2025

No hay mejor manera de finalizar con éxito un curso sobre España que con una buena paella. Así lo hicieron este jueves los 61 estudiantes ... que han participado en la edición veraniega de Lengua y Cultura Españolas. Organizado por la Universidad de La Rioja en el marco del proyecto Campus Valle de la Lengua, el programa que hace treinta años que invita a jóvenes interesados en aprender español, o perfeccionarlo, a pasar un mes de integración cultural en Logroño.

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Se trata de una oportunidad única por el cómputo de actividades que se preparan. Los estudiantes han visitado la Bodega Campillo, han conocido San Millán de la Cogolla, han participado en visitas guiadas en Logroño y La Guardia... una integración total que muchos completan alojándose con familias de acogida logroñesas.

Más de la mitad son norteamericanos, pero también han venido a Logroño estudiantes de Tailandia, Polonia, Kazajistán, Sri Lanka o Corea del Sur. A todos les une la motivación por explorar una cultura nueva. Shirly Hernández viene de Nueva York y ha quedado fascinada con «lo fácil que es caminar en Logroño, lo rápido que se llega de un lugar a otro». Aunque lo que realmente le ha llamado la atención ha sido «la cantidad de vino que beben y la ligereza con la que lo hacen».

Aticha, Joao, Sarah y Shirly posan antes de probar la paella. Juan Marín

También a Athicha Sutthibenjakul, de Tailandia, le ha encantado Logroño. Vino porque su universidad tiene un convenio con la UR, pero sin saber muy bien qué era eso de La Rioja. Ahora no lo duda: «Me gustaría volver y quiero motivar a la gente a venir, lo van a disfrutar».

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Al brasileño Joao Pierini le ha traído hasta España su literatura. En este viaje ha aprovechado para leer el 'Lazarillo de Tormes' y empezar 'El Quijote', una pasión que ha podido compartir con los profesores de la UR.«Me han gustado mucho las clases, la cercanía que se ha creado entre todos, la disposición de todos a participar y las experiencias que hemos compartido», afirma.

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