Hay mujeres que portan velo que se respetan a sí mismas y exigen respeto como cualquier feminista occidental. También hay varones musulmanes que disfrazan su ... comportamiento despreciativo como tradicionalismo y eso es mal uso del Corán, no el mensaje del Corán. Entre los católicos también hay trogloditas. Recuerdo a dos actrices cuyo físico sólo puede generar envidia, que al acudir a un programa sufrieron toda clase de insultos en Instagram por su aspecto. Una eligió un outfit muy original y la otra, lesbiana y con pelo corto, ya tenía que ser severamente disciplinada. Quizá si llevaran velo a modo de protesta mandarían el mensaje de que su físico no es asunto de según que gente. A los católicos que desprecian al diferente usando religión y tradición como excusa, habría que recordarles las palabras del papa Francisco llamándoles infiltrados. El actual Pontífice luchó contra un secta cuya primera norma era: «El que obedece no se equivoca nunca». Para Hannah Arendt esta era la esencia del mal porque implica la prohibición de pensar.
Publicidad
Alberto Costa Egea
¡Oferta especial!
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión