La Rioja recupera entre 14 y 16 millones de los 27 que jugaba

El proceso de la Lotería de Navidad siempre (o casi siempre) es igual. A las 9 de la mañana las esperanzas de que el Gordo sea uno de los números comprados desde el pasado veranos son infinitas y, como hacía la lechera, quien más quien menos empieza a gastarse los 324.000 euros que, tras darle lo suyo a Hacienda, se reciben por cada décimo del primer premio. Cuando esa esperanza se esfuma, se pasa a la ilusión del segundo o del tercer premio. Cuando todos los anteriores son esquivos los cuartos se ven con otros ojos, incluso los quintos.

La Rioja ha tenido que rebajar un peldaño más su nivel de conformismo hasta alcanzar las pedreas, los reintegros, las aproximaciones y las terminaciones, entre cinco y seis euros por cada euro jugado. Calderilla de un sorteo (otro más) para olvidar en La Rioja, en donde tan solo han caído, y muy frugalmente, tres quintos premios: diez décimos del 69823, cuatro del 06293 y uno más del 66212.

Con ese escaso botín (90.000 euros en grandes premios), recuperar la inversión será limitada. Las terminaciones, las pedreas y las aproximaciones devolverán a La Rioja «entre el 50 y el 60% de lo gastado», apuntaba ayer, en un improvisado balance, el delegado de Loterías y Apuestas del Estado en La Rioja. «Sin grandes premios, no se puede recuperar mucho más», argumentaba. Eso implica que, en el mejor de los casos, La Rioja recuperará unos 16 millones de los más de 27 que este año se han gastado en el sorteo de Navidad. Si el recuento final es más parco, el volumen de lo recuperado no alcanzará los 14 millones de euros.

Más allá de los 90.000 euros de esos tres quintos premios, muchas han sido las terminaciones en 89 (segundo premio) y 90 (el Gordo) que dejan premios de 5 y 6 euros por euro jugado. También la apuesta por el código postal era buena opción este año: todos los de La Rioja empiezan por 26, como el Gordo, pero el 26590 no corresponde con ningún municipio riojano. Arnedillo y Préjano, que comparten el 26589, son los que más se hubieran acercado. Si alguien compró un décimo de ese número, tiene 2.200 euros en el bolsillo.

Logroño, a expensas de terminaciones, de pedreas y de que los asiduos veraneantes de Salou pudieran haberse traído, además de un buen moreno, algún décimo del Gordo, ha sido la ciudad más 'afortunada' en el sorteo de la mañana de ayer: trece décimos de dos quintos premios se vendieron en la capital. La Administración La Uva de la Fortuna del Centro Comercial Parque Rioja (que ya en el 2014 repartió un millón de euros al vender el número posterior al Gordo de aquel año) repartió en la mañana de ayer 60.000 euros en 10 décimos del 69823 (6.000 euros cada uno), uno de los quintos premios. Otro quinto, el 06293, también se dejó ver en Logroño: la Administración de Loterías número 2 (Capitán Gallarza) vendió por terminal dos décimos mientras que la número 7, ubicada en Gran Vía 54-56, colocó otro más entre sus clientes. Entre las muchas terminaciones premiadas, uno de los números de la AECC, el 53489 (cinco euros por euro jugado).

Junto a los tres décimos que se vendieron en Logroño, el 06293 también hizo un guiño a La Rioja Alta haciendo una parada en las calles de San Asensio. Allí, en el Bar Jesús de la Plaza Nueva y a través del terminal de Loterías y Apuestas del Estado, se vendió un décimo del quinto premio que recibirá 6.000 euros.

En Haro también cayó un quinto premio, pero lo hizo de una manera tan tímida que únicamente se vendió un décimo del 66212 (premiado con 6.000 euros). Fue en la Administración de Loterías La Herradura, ubicada en avenida de La Rioja 27 de la localidad jarrera.

En Arnedo, más de un corazón se paró, o casi, cuando los niños de San Ildefonso cantaron el madrugador Gordo. La bola que salió fue la del 26590, y el número que no pocos arnedanos jugaban es el 26580, que corresponde con el código postal de la localidad. Quedarse tan cerca del Gordo tiene recompensa: 120 euros al décimo, seis euros por euro jugado. En Munilla también se quedaron cerca: la asociación de Amigos de Munilla vendió el 26586, premiado con 100 euros al décimo.

Calahorra no reeditó este año su particular idilio con la Lotería de Navidad y se tuvo que conformar con aproximaciones y pedreas. Por ejemplo, las trabajadoras del Mercadona local, que jugaban el 97690, y quienes compraron el número de la Asociación El Lazarillo (00490), han ganado seis euros por cada euro jugado. El CD San Agustín también acertó con la terminación doble del Gordo y se lleva la misma recompensa tras jugar al 37990.

El restaurante Sanda de Cervera del Río Alhama compró los décimos del 49490 en Alfaro y desde su barra ha repartido entre sus clientes (todo en décimos) un total de 168.000 euros a razón de 120 euros el décimo. Y también el partido político +RO, de Rincón de Olivedo, repartió algo de dinero con sus participaciones del número 82090.

En Santo Domingo de la Calzada, la suerte con mayúsculas ha vuelto a pasar de largo, otro año más, si bien los premios pequeños -pedreas y reintegros- han sido muy numerosos y ello, según la administración de lotería El Gallo y la Gallina, va a permitir recuperar en torno al 50% de lo vendido. Por citar algunas, el bar La Rueda vendió el número 68490, dotado con 120 euros por décimo, y La Botánica el 87690, con igual premio. La peña calceatense del Real Madrid juega siempre al número coincidente con el código postal de Santo Domingo de la Calzada, el 26250, que en este sorteo tiene un premio, de momento, de 6 euros por cada euro jugado. También ha obtenido pedrea la lotería vendida en las parroquias de Castañares de Rioja y Bañares.

En Alfaro, sin ninguno de los grandes premios consignados en la localidad o vendidos por terminal, el sorteo solo dejó terminaciones, reintegros y pedreas. Entre los que acertaron con la terminación del Gordo está el Club Deportivo Alfaro, que eligió el 31890, premiado con seis euros por cada euro jugado.