De parking a plaza interior

Aunque parezca algo de actualidad, las aceras, parques y plazas llevan muchos años ganando espacio a los coches y aparcamientos en la ciudad de Logroño. Para una muestra más, el caso de la Plaza Virgen de la Esperanza –junto a República Argentina–, que toma el nombre de esos bloques de viviendas que se levantaron allí a partir de la década de los cincuenta, cuando florecieron las casas a un lado y el otro de la vía. Un parking interior, como ilustra la imagen de 1993, convertido tiempo después en una plaza con verde, bancos y una rampa de acceso y en la que los mismos árboles siguen impertérritos.

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