Preguntas con respuesta

No. El derecho potencial de amparo es igual para todas las hectáreas, independientemente de la zona, del pueblo, la variedad (excepto las diferencias entre uvas tintas y blancas) o la edad del viñedo.

Una viña joven, con clones más productivos y mayor vigor, produce más. Muchas parcelas de viñedo viejo no llegan a 4.000 kilos por hectárea, mientras la mayoría de las jóvenes exceden los 6.500 sin problemas. Si apenas hay diferencias de precio entre una y otra no compensa la de menor rendimiento.

Aunque algunos técnicos lo discuten, la realidad es que sí. Entre otras cosas por el propio sistema radicular y adaptación de la viña, pero también porque el material genético histórico producía uvas de calidad, y no cantidad, como se orientó la viticultura con las selecciones clonales viveristas con el 'boom' productivo de Rioja en el último cuarto del siglo pasado.

Por precio. Hay bodegas que lo compensan pagando más por el kilo de uva pero siguen siendo las menos. También alguna cooperativa paga a los productores como si tuvieran la producción máxima amparable aunque estén por debajo de los 4.000 kilos en realidad.

Normalmente, viticultores, bodegas y cooperativas tienen viñedos viejos y jóvenes, pocos y más productivos. Si un viñedo resta 2.000 kilos sobre el papel, lo que se ha hecho es permitir compensarlo a un mismo titular con producción de las fincas más jóvenes (el reglamento de Rioja establece que los máximos son por parcelas). Incluso, en momentos de escasez de uva, el 'papel' tiene su precio.

Por rentabilidad: el trabajo es manual, más duro y más caro, la producción es menor y, si no se paga, no compensa. Si un agricultor cubre su cartilla de papel con un viñedo más joven, no lo vendimia. También hay viticultores mayores que, al no poder llevarlos por edad, los cedían a renta. Si el precio de la uva no da margen no hay renta ni para el rentero ni para el propietario, por lo que los viejos viñedos se llegan incluso a abandonar.