Matemáticas y Enfermería requieren más de un 10 para poder acceder a estos estudios

De ellas, Matemáticas volvió a registrar el pasado curso la nota de corte más elevada (viene determinada por la calificación con la que accede el último alumno matriculado en una titulación determinada), con un 12,38. Una puntuación que, en cualquier caso, persiste sin apenas variación con respecto a los últimos cinco años académicos (ha pasado del 12,26 del 2019-20, al 12,49 del 20-21, al 12,63 del 21-22 y al 12,39 del 23-24). En todas las convocatorias se ofertaron 25 vacantes, que rozaron el lleno absoluto durante los dos primeros cursos (en los que la tasa de cobertura fue del 96%) y se completaron en los siguientes (hasta el punto de que el pasado año hubo dos pupitres más en las aulas de los 25 que contemplaba el cupo inicial, con una tasa del 108%).

Enfermería, de nuevo, se erigió como la segunda titulación con mayor nota de corte, que el pasado año alcanzó un 11,75 (frente al 10,85 que se registró en la convocatoria ordinaria del 2019-20) y una tasa de cobertura del 96,67% (hubo 87 alumnos). Durante este curso, sin embargo, se aumentaron hasta 90 las plazas ofertadas, todo debido a que sus 75 vacantes acumulaban más de un millar de solicitantes. Un incremento que, dada su alta demanda, se elevará todavía más durante los siguientes años académicos: llegará hasta los 120 pupitres en el próximo curso y hasta los 150 en 2025-26. No en vano, su calificación nunca ha bajado del 10 durante las últimas cinco convocatorias.

El tercer grado que requirió mejor expediente fue Ingeniería Informática, con un 9,4 (frente al 8,8 del 2019-20, que fue cuando alcanzó su calificación más baja). Su nota de corte, por el contrario, no ha bajado nunca del 9 durante los últimos cuatro años académicos (fue del 9,96 en el 2020-21, del 9,84 en el 21-22, del 9,93 en el 22-23 y del 9,4 del pasado 23-24). En todas las convocatorias se ofrecieron 50 plazas y se llenaron, por lo que fue una carrera demandada por los aspirantes universitarios. Le siguió de cerca el Grado en Derecho, donde el último de los estudiantes que accedió a esta titulación lo hizo con un 8,94, cifra que se erigió como la puntuación más alta de los cinco años académicos anteriores (su nota de corte ha aumentado un 10,7% desde el curso 2019-20).

Un poco más atrás se quedó Química, con un 7,89, puntuación que se aleja de la registrada durante el curso anterior (donde la última matrícula se efectuó con un 9,15 sobre 14 puntos). Menos exigentes fueron las dos titulaciones de Magisterio, donde los últimos alumnos que accedieron el pasado año a Educación Infantil y Primaria lo hicieron con un 7,35 y 7,42, respectivamente. En ambas carreras, sin embargo, esta calificación ha ido en aumento (ha pasado del 6,51 del curso 2019-20 al 7,35 del pasado año; y del 5,79 al 7,42 del 2023-24).

En el otro lado de la balanza, sin embargo, se situó el Grado de Trabajo Social, que el pasado año académico permitió que el último alumno matriculado en esta titulación pudiera ocupar el pupitre número 51 con un 5,8 (frente al 6,5 sobre 14 que se pedía en el curso 2019-20). Hay otras titulaciones, como Administración y Dirección de Empresas, Relaciones Laborales y Derechos Humanos, Turismo, Estudios Ingleses o Geografía e Historia, que no disponen de una nota de corte porque no se llenaron la totalidad de sus plazas. La misma situación se repite en Lengua y Literatura Hispánica, Enología, Ingeniería Agrícola, Ingeniería Mecánica, Ingeniería Eléctrica e Ingeniería Electrónica Industrial y Automática, que registraron una demanda inferior a la ofertada.