El Gobierno insta a los municipios a acometer restricciones para reducir el consumo un 20%

Para ello, el Ejecutivo regional plantea medidas que en algunas localidades ya se están desarrollando como reducir los baldeos de calles con el compromiso de mantener los criterios de salubridad, cerrar las fuentes ornamentales de ciclo abierto de las que manan agua de manera continuada o reducir el riego de parques y jardines públicos. En este sentido, la propuesta es restringir en un 20% el uso de agua y revisar los sistemas para garantizar su eficacia.

Limitar el riego de jardines al horario nocturno para evitar la evaporación del agua, recortar un tercio el régimen de riego de campos de golf o el reducir el uso de agua en huertos urbanos figuran también entre las medidas. Todas ellas son de competencia municipal y corresponden a los ayuntamientos adoptarlas.

Mención aparte merecen las piscinas y se descarta impedir el llenado. Sin embargo, sí que el gabinete de Concha Andreu recomienda el mantenimiento, clorado y reciclado del agua en el caso de las piletas de titularidad privada para evitar su vaciado y llenado. A pesar de la situación crítica que tiene la cuenca del Iregua, el consejero de Sostenibilidad y Transición Ecológica, Álex Dorado, garantizó que el abastecimiento «a día de hoy está asegurado y no existe riesgo de que se sufran cortes de agua. Pero sí entendemos que hay algunos usos que no son esenciales y con la limitación de su consumo podemos arrimar el hombro en esta situación de sequía».

Dorado también hizo especial hincapié en la importancia de la concienciación ciudadana y por ello va a poner en marcha en próximas fechas una campaña de sensibilización sobre el uso responsable en el consumo de agua y la importancia del ahorro. Asimismo, concedió relevancia a la detección y reparación de fugas porque «hay municipios que pueden llegar a perder el 50% del agua de abastecimiento» por el mal estado de las redes.

«Vamos a ayudar a los ayuntamientos a impulsar uno de los ahorros más importantes y menos traumáticos que podemos hacer, como es la detección de fugas en las redes de distribución», apuntó el consejero, que reconoció que se trata de una inversión que a veces se relega porque es menos visible que otras actuaciones, pero es totalmente necesaria». La Consejería de Sostenibilidad acaba de conceder casi 5,5 millones de euros en ayudas para mejorar las redes de abastecimiento de 75 municipios con menos de 20.000 habitantes.

El Gobierno riojano también se comprometió durante la reunión celebrada en la Fombera –asistieron una quincena de municipios– a desarrollar con fondos propios, «pese a ser una competencia municipal, una campaña de detección de fugas en las redes de abastecimiento en los municipios del Bajo Iregua». En un comunicado, detalló que «una vez que se haya realizado ese mapeo, se colaborará con los ayuntamientos con mayores pérdidas de agua por fugas para reparar esas averías que provocan los mayores desperdicios en el abastecimiento del agua potable».

Aunque también el foco está puesto en la optimización de los usos agrícolas, «que consumen el 84% de los recursos de La Rioja», detalló Álex Dorado; el 12,5% es para agua de boca y el otro 3,5% para uso industrial. «Hay que modernizar los regadíos», enfatizó, pero también lanzó un mensaje al conjunto de la ciudadanía «porque todos debemos colaborar y mostrar solidaridad con los que peor lo están pasando en estos momentos de sequía como son los regantes». Y los del Iregua aún sufren más.