La crema antiarrugas que desató la locura

Entre los pasillos que llevaban este jueves a la sección de cosmética de uno de los establecimiento que la conocida cadena alemana Lidl tiene en Logroño ya se podía intuir el infortunio: "Pues vaya pena, hemos venido sólo por la crema antiarrugas y no hay ni una". Y más lamentos: "¿Y qué hacemos las que trabajamos y no hemos podido venir a primera hora de la mañana para hacernos con ella?". Una pregunta que los mismos clientes se contestaban: "Tendremos que probar suerte e ir hasta el Lidl de Alcampo a ver si todavía queda alguna". Varias mujeres se agolpaban desazonadas frente a la estantería en la que debería encontrarse el producto milagro del día. Sí, había leche corporal, crema hidratante, de manos... Pero ni rastro de la afamada crema. En su lugar, varias cajas vacías y un cartel en el que podía leerse: Estimados clientes, pedimos disculpas por no disponer de la crema Q10. Hemos vendido en una mañana lo que vendemos en un año.

El ambiente en el establecimiento de la calle Vara de Rey de Logroño era de decepción, entre sus corredores y en las colas de las cajas no se hablaba de otra cosa que no fuera la crema antiarrugas, valorada por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) como la mejor del mercado, a pesar de su módico precio de tan sólo 2,99 euros.

En concreto, se trata de la CIEN Crema de Día Q10 que lidera el ranking de los mejores productos antiarrugas faciales, superando a cremas de reconocido prestigio en nuestro país, siempre según el citado informe de OCU. Su secreto radica en el componente estrella, el liftan, un complejo activo a base de ingredientes específicos para reducir la aparición de arrugas.

Unas ventajas que al parecer justifican las escenas vividas este jueves. En el supermercado han explicado que desde las nueve de la mañana, hora de apertura, ya se agolpaban numerosas personas frente a las puertas de acceso "que incluso han llegado a atascarla", sólo para hacerse con algún bote de la milagrosa crema. Fruto de tanta expectación es que en apenas unos minutos Lidl ha vendido sólo en este comercio unos 600 botes, "que han volado de las estanterías".

Para consuelo de los desazonados consumidores, desde el supermercado advierten que tienen previsto reponer las cantidades disponibles del producto "bien para este sábado o para la semana que viene. Así que todos aquellos logroñeses que se han quedado sin el producto todavía tienen una segunda oportunidad.