Las caras de los siete exetarras con delitos de sangre

También fueron condenados por terrorismo y van a las listas de Bildu Lander Maruri Basagoiti y Asier Uribarri Benito, sentenciados el 2000 a 16 años de prisión para participar como cómplices en el asesinato, en 1997, del guardia civil José Manuel García Fernández. También José Antonio Torre Altonaga, por haber colaborado en el atentado que mató en 1978 dos trabajadores en unas obras en la central nuclear de Lemoniz. También condenados por asesinatos figuran Begoña Uzkudun Etxenagusia y Juan Carlos Arriaga Martínez.

Algunos de los siete exetarras con delitos de sangre que han renunciado ahora a ir en las listas negras de Bildu llegaron a cometer asesinatos en los pueblos donde ahora pretendían ser elegidos concejales.

Es el caso de Juan Ramón Rojo González, condenado a 27 años de cárcel por el asesinato del policía nacional José Ansean en Bilbao y a otros 30 años de prisión por el asesinato de Francisco Gil en Irún. Paradójicamente Bildu le presenta como número 21 de la lista de la alcaldía del municipio vasco donde asesinó a la víctima.

Caso parecido es el de Begoña Uzkudun, condenada en 1989 a 18 años de prisión por el asesinato en 1984 del concejal del Ayuntamiento de Azkoitia, José Larrañaga Arenas, aunque también acumuló otras condenas por encubrimiento y falsificación de documentos. La etarra salió de prisión en 2006 pese a que todavía le quedaba condena por cumplir. Ahora se presentaba con Bildu como número tres a la Alcaldía de Regil, municipio que se encuentra a menos de 15 kilómetros de la localidad donde asesinó a la víctima.

Agustín Muiños Díaz, 'Tinin', que concurría en la localidad alavesa de Legutiano, fue condenado en 1985 a 29 años de prisión por el asesinato del empresario José Antonio Julián Bayano, perpetrado en 1983. La condena especificaba que la pena iba acompañada de la «inhabilitación absoluta» durante el tiempo de ejecución de esta. En la misma localidad ya fue concejal e incluso alcalde Iñaki López de Bergara, 'Yves', exjefe de los comandos en la reserva de ETA.

Juan Ramón Rojo González ocupa el número 21 en la lista a la alcaldía de la localidad fronteriza de Irún. En 1996 fue condenado a 55 años de prisión por asesinar a Francisco Gil Mendoza y causar heridas graves a su hermano. Rojo González, según relataría otros miembros de la banda, les ametralló en una plaza de Irún porque creía que eran traficantes de drogas. Rojo también fue condenado a 27 años por el asesinato de un policía en Bilbao.

Lander Maruri, en la foto superior a la izquierda, y Asier Uribarri, a la derecha, formaban parte de las listas de Bildu en la localidad vizcaína de Zierbena. Ambos están condenados por haber hecho llegar a ETA la información suficiente para matar al guardia civil José Manuel García Fernández. Este agente del instituto armado sería asesinado en 1997 de un tiro en la nuca mientras cenaba en una marisquería de Zierbena junto con su esposa, que resultó ilesa. Por estos hechos, Maruri y Uribarri fueron condenados en 2001 a 16 años de prisión. Con anterioridad habían recibido otra pena por dar información al 'comando Vizcaya' para lanzar granadas contra las instalaciones de Petronor en Muskiz.

José Antonio Torre Altonaga, 'Medius', se presenta como suplente número dos en la lista a la alcaldía de Mungia, Bizkaia. En 1981 fue condenado a 20 años de prisión por su colaboración en el asesinato de los trabajadores de las obras de la central nuclear de Lemoiz, Alberto Negro y Andrés Guerra. En el momento de su arresto, en diciembre de 1978, estaba considerado uno de los jefes del 'comando Vizcaya'.

Begoña Uzkudun fue condenada en 1989 a 18 años de prisión por haber participado en el asesinato del concejal del Ayuntamiento de Azkoitia, José Larrañaga Arenas, cometido en 1984. Durante su militancia dentro de la banda terrorista también acumuló otras penas por encubrimiento y falsificación de documentos. La etarra salió de prisión en 2006 pese a que todavía le quedaban varios años de pena por purgar. Hasta hoy se presentaba con Bildu como número tres a la Alcaldía de Regil, municipio que se encuentra a menos de 15 kilómetros de la localidad donde vivía su víctima.

Juan Carlos Arriaga era el número tres de la candidatura de Bildu en la localidad navarra de Berrioplano. Fue condenado a 29 años de prisión por su participación en el asesinato del militar retirado Jesús Alcocer Jiménez, perpetrado en 1984. El comando en el que militaba Arriaga disparó en la nuca a Alcocer cuando se encontraba en el mercado de la capital navarra para hacer la compra. Los terroristas escaparon en un vehículo que fue localizado horas más tarde en Pamplona por agentes del Cuerpo Nacional de Policía. Los agentes Tomás Palacín Pellejero y Juan José Visiedo Calero fallecieron al estallar una bomba trampa que los terroristas habían ocultado en el interior del coche.