El Palacio de los Deportes deja de ser el talismán franjivino
El pabellón riojano, antes inexpugnable para el adversario, no ha visto puntuar al Ciudad de Logroño este curso
Hubo un tiempo en el que el Palacio de los Deportes era un lugar inexpugnable para los rivales del Ciudad de Logroño, un equipo intocable en su casa. Y no solo en la Liga Asobal, en el que solo el Barça (a veces ni siquiera el conjunto azulgrana) se llevaba la victoria. Los equipos europeos que desfilaban por el pabellón riojano regresaban a sus hogares con las orejas gachas. Incluso los mejores del continente. Pero esos tiempos parecen haberse difuminado.
Aunque todavía la Liga Asobal está en sus inicios, el conjunto franjivino todavía no ha logrado puntuar en su casa. Los únicos dos puntos que ostentan los riojanos fueron conseguidos, en uno de los mejores partidos del bloque de Velasco, en el Palacio de los Deportes de León ante un Ademar que arrastra una dinámica similar a la de los hombres del entrenador segoviano.
En su debut liguero, el Ciudad de Logroño, contra todo pronóstico, perdió frente al Blendio Sinfín de Rubén Garabaya, una de las sorpresas en este inicio de curso, por 27-31. Fue un jarro de agua fría para un bloque que unos días antes, y con un muy buen balonmano, había empatado contra todo un Lemgo por la eliminatoria europea de la que fue apeado por el equipo alemán. La poca solidez defensiva y unos malos porcentajes de la portería no pudieron impedir que un ordenado equipo cántabro ganase en Logroño.
La historia ante el cuadro oscense juega a favor de los riojanos: de diez partidos han ganado nueve y empatado uno
Una muy mala imagen que se disipó unos días después en la ciudad de León (triunfo 34-38 sobre el Ademar) pero que volvió a hacerse presente el viernes 16 de septiembre ante el Granollers. En la peor primera parte de su historia, en la que el conjunto franjivino solo marcó cinco goles, el BM Logroño se mostró como un equipo inseguro. Pero lo más irritante, los riojanos evidenciaron una ausencia total de intensidad. Al final, el 24-35 final maquilló el desastre ofrecido ante su público.
Mañana, a partir de las 20.30 horas, los de Miguel Ángel Velasco tienen la oportunidad de enmendar lo sucedido hasta el momento en el Palacio de los Deportes. La historia avala al equipo riojano contra el oscense en los partidos jugados en la capital.
El Ciudad de Logroño y el Huesca se han visto las caras una decena de veces desde la temporada 2011/12, año que logró el ascenso el conjunto del Alto Aragón. El conjunto franjivino ha ganado nueve de esos encuentros y ha empatado uno, el disputado en el curso 2017/18 cuando igualaron 28-28.
Todos los demás choques cayeron del lado riojano, el último de forma muy ajustada (28-27), el 20 de noviembre del 2021, gracias a una parada de Jorge Pérez en el último lanzamiento de los oscenses sobre la bocina. Precisamente ahora es cuando la portería y la defensa deben responder después de un inicio muy flojo de temporada, en la que los números le relegan (con un 18% de acierto) al último puesto.