Mediterráneos, pero no tanto
Alimentación. La mayoría de los alimentos y bebidas publicitados bajo el concepto 'mediterráneo' no están incluidos en la dieta que lleva su nombre
REDACCIÓN
Sábado, 26 de febrero 2022, 01:00
El concepto 'mediterráneo' parece asimilarse, en muchas ocasiones, a saludable. La referencia casi constante a la 'dieta mediterránea' como paradigma de una alimentación equilibrada ha hecho que, en muchas ocasiones, su significado se extrapole de manera interesada.
Publicidad
Un reciente estudio elaborado por las investigadoras Mireia Montaña, profesora de los Estudios de Ciencias de la Información y de la Comunicación de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), y Mònika Jiménez, profesora del Departamento de Comunicación de la Universidad Pompeu Fabra (UPF), concluye que la mayoría de los productos alimentarios y bebidas publicitados bajo el concepto «mediterráneo» no están incluidos en la pirámide nutricional de la dieta mediterránea.
En la investigación se analizaron 1.219 anuncios de alimentos de 103 productos y 541 anuncios de bebidas de 109 productos, correspondientes a publicidad difundida en diferentes tipos de medios de comunicación en España (periódicos, revistas, televisión, radio, internet, etc.) entre 2011 y 2020. Los resultados mostraron que solo el 13,59 % de los productos publicitados bajo el reclamo «mediterráneo» tenían un valor nutricional alto, según su valor Nutri-Score. En cuanto al resto, otro 13,59 % tenía un valor nutricional muy bajo y un 29,13 %, bajo; un 25,27 % obtuvo un valor nutricional medio, y un 19,42 % tenía un valor nutricional medio-alto.
Los productos que más recurren al «mediterráneo» son tomate frito y salsas
Como explica Mireia Montaña, «según la legislación española aplicada a la publicidad, no es estrictamente publicidad engañosa. Pero la ley de la publicidad data de los años ochenta y tiene grandes imprecisiones, además de ser muy vaga en ciertos aspectos», señala Mònika Jiménez. «Por eso, aunque algunos de los componentes de estos productos están amparados en el concepto de dieta mediterránea, en realidad se trata de publicidad engañosa, ya que tienen solo algún componente que forma parte de la pirámide nutricional de la dieta mediterránea. Si analizas el etiquetado, no tienen mucho de producto saludable. Es decir, no se mira el producto completo», añade.
Concretamente, los productos alimentarios que más recurren al reclamo de «mediterráneo» son el tomate frito y las salsas, seguidos de sopas y comida precocinada.
Una de las principales razones para fomentar una alimentación saludable basada en la dieta mediterránea es combatir la obesidad. Como llevan años advirtiendo los expertos, la obesidad se ha convertido en una «epidemia» en la sociedad actual. Según la OMS, el 44 % de las personas adultas de 18 años o más tienen sobrepeso o son obesas. Y el panorama no es distinto en España: la Encuesta Europea de Salud en España del año 2020 reveló que un 16,5 % de hombres de 18 años o más y un 15,5 % de mujeres padecen obesidad. La principal causa de esta situación es una dieta basada en productos de nivel nutricional bajo que, a su vez, son ricos en grasa, sal o azúcares.
Publicidad
«La dieta mediterránea ha sido reconocida como un patrón dietético que tiene múltiples beneficios para la salud y contribuye a muchos otros objetivos de desarrollo sostenible propuestos por las Naciones Unidas», recuerda la profesora Mireia Montaña, también investigadora del Grupo de Aprendizajes, Medios de Comunicación y Entretenimiento (GAME) de la UOC. «Consciente de esos beneficios, la publicidad lo utiliza como reclamo para llegar a los consumidores, pero el lenguaje engañoso puede dañar su salud», indica la profesora.
Además de una regulación más rigurosa, las investigadoras concluyen que también es necesario formar al consumidor para que entienda las etiquetas nutricionales. «Al fin y al cabo estamos hablando de alimentos y, por lo tanto, de salud».
¡Oferta especial!
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión