Fusión artística a la luz del sol en Ventosa

La localidad de Ventosa, tan centrada en los aspectos culturales a través de su Kilómetro de Arte y en su relación con el Camino de Santiago, vivió ayer un nuevo capítulo en el que diversas ramas artísticas se fusionaron para ofrecer un espectáculo insólito con la luz del sol como ingrediente fundamental añadido, y todo ello a la vera mismo de la Ruta Jacobea.

Por medio del MACC (Museo de Arte Contemporáneo del Camino), con la colaboración del Gobierno de La Rioja, el Ayuntamiento de Ventosa, Bodegas Alvia y el patrocinio de La Rioja Turismo, la compañía Artistas Inflamables llevó a cabo una doble representación de danza, acompañada de música y textos, titulada 'De lo alto de altos edificios'.

El espectáculo reunió algunas peculiaridades que lo hacen único. Por un lado, la representación tuvo como escenario el interior de la escultura de José Carlos Balanza '0,001366664056s luz'. Por otra parte, tuvo lugar en dos momentos especiales del día: justo cuando sol se iba elevando sobre el horizonte para dar lugar al día en todo su esplendor y en el momento en que comenzaba a desaparecer por poniente para dejar paso a la noche. Momentos mágicos sin lugar a dudas.

Por si fuera poco, todo ello estuvo enmarcado en plena naturaleza y muy cerca de unos viñedos que están a punto de ofrecer sus vides para que se transformen en vino.

Además, a los espectadores que acudieron a contemplar la representación alertados por los anuncios publicitarios y las informaciones aparecidas en los medios de comunicación, se sumaron otros más espontáneos, los peregrinos que caminan hacia Santiago de Compostela y que pasaban en esos momentos por el lugar.

Con esos ingredientes, a las 8.45 horas se ponía en marcha la primera representación, la segunda sería a las 19 horas. La bailarina e intérprete Luciana Croatto fue la encargada de poner en tan singular escenario la coreografía de Billy Cowie, autor también del texto y de la música. Se da la circunstancia de que el espectáculo, «que habla de la vida entre cuatro paredes, así como de la belleza y dureza unidas para enseñarnos que la naturaleza siempre se abre paso, hasta en los peores momentos», fue creado por el Centro Coreográfico de La Rioja-Madruga producciones, en El Villar de Arnedo durante el confinamiento.

Al final de la representación la bailarina se vio obligada a salir a saludar en varias ocasiones, ante la larga ovación del púbico asistente. No es extraño que Croatto pusiese de manifiesto su emoción tras el primer pase, indicando que «bailar en la naturaleza es un desafío muy grande, ya que su belleza le supera a uno, le hace sentirse como en un abismo interior», resaltando que la escultura de Balanza «es muy apropiada para esta representación, es muy impresionante y estos poemas tienen que ver mucho con esta estructura de casa que tiene. Es una combinación perfecta y sentí muchas cosas mientras bailaba», dijo.

Por su parte, el escultor se mostraba «muy bien y muy feliz» tras la representación, que calificó de «muy emocionante». Y puso de relieve que, «por primera vez en mi vida, una obra de arte, una escultura, acoge a otra obra de arte y, como consecuencia, como debe ser el arte. Cada una tiene su explicación, su camino, su desarrollo y su concepto, pero se han encajado».

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