Lardero destina 748.400 euros al servicio de ayuda a domicilio

La legislatura acaba en el Ayuntamiento de Lardero con la licitación del servicio de ayuda a domicilio. Para el equipo de gobierno la ayuda a domicilio y otros apoyos a la unidad de convivencia es una prestación básica de servicios sociales que proporciona una serie de atenciones o cuidados de carácter personal, doméstico, psicosocial, educativo y técnico, que se presta en el domicilio a familias y personas con dificultades para procurar su bienestar físico, social y psicológico, proporcionándoles la posibilidad de continuar en su entorno habitual.

Lo que se procura es que una empresa realice una gestión integral de toda esta ayuda que se presta en la localidad por un valor aproximado de 748.400 euros, abonándose la hora a 18,72 euros (IVA incluido). La duración del contrato es de dos años, con opción a una prórroga de uno más, de manera que se prestarían 13.200 horas anuales de servicio. De esta manera, y a través de los Servicios Sociales del Consistorio larderano, se favorece la permanencia de la persona dependiente en su propio ambiente familiar asegurando un tratamiento individualizado en la prestación de servicios, se mejora la calidad de vida procurando una existencia más segura e independiente a las personas atendidas, se previenen situaciones de crisis familiares que perjudiquen a los usuarios, se sustituye a la familia cuando esta no exista o no se encuentre presente por una situación de emergencia, se completa la labor familiar cuando ésta esté desbordada y se compensa una atención familiar inadecuada que se pueda producir por la carencia de recursos.

El horario que prevé el Ayuntamiento de Lardero para la prestación del servicio es de 7.30 a 22.00 horas, excluyendo días festivos, aunque con posibilidad de ampliar la atención en casos extraordinarios. Los posibles beneficiarios de la ayuda a domicilio deberán ser evaluados por el Área de Servicios Sociales del Consistorio larderano a fin de establecer el grado de dependencia y, por tanto, de asistencia que necesite cada usuario, así como el apoyo a su familia o cuidadores habituales. Y es que la ayuda que se presta es tanto de carácter personal como doméstica, así como de carácter psicosocial y educativo, atención a la infancia e, incluso, de «respiro familiar».