Indalecio Ríos, junto a vagones desperdigados por su finca, seis meses después. M. CARO

Una finca en Haro donde crecen los vagones

Tras el descarrilamiento de un tren el pasado mes de marzo, los restos continúan en parcelas en las que destrozaron nogales, alcachofas, vallado y riego

Jueves, 4 de septiembre 2025

El 15 de marzo descarriló un tren a la altura de San Felices, en Haro. Varios vagones fueron arrastrados durante metros hasta la ... entrada en la ciudad, golpeando incluso parte de la estación ferroviaria, y más adelante un giro provocó su caída a las huertas ubicadas junto al polígono Fuenteciega.

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Una de las más afectadas se encuentra en el polígono 8, donde fueron a parar dos grandes vagones, dos plataformas y ruedas, llevándose por delante 50 metros de vallado cinegético metálico (que ha habido que reponer para evitar la entrada de animales como los frecuentes jabalíes), 20 postes de madera de la valla de 2,5 metros de altura y 11 árboles de nogal de 11 años de edad que se encontraban en plena producción. Ejemplares para cuya recuperación sería necesaria una nueva plantación, su cultivo y 3 años de entrada en producción, con la consecuente pérdida de beneficios durante este tiempo. También afectó a dos hileras de alcachofas cultivadas a lo largo de unos 40 metros y, además, la caída de los vagones destrozó el riego, tanto el depósito como el sistema de goteo y la canaleta que lo distribuye. En total, un valor aproximado de 16.500 euros.

M.C.

El accidente sucedió a las dos de la madrugada y a la mañana siguiente Indalecio Ríos se encontró así su finca. Y así continuaba ayer, casi seis meses después, tras un farragoso periplo en el que se ha buscado una solución a esta situación sin resultado alguno.

Al día siguiente del suceso se denunciaron los hechos en la Guardia Civil, reclamando los daños causados, así como en el Juzgado de 1ª instancia de Haro. Pero aún no ha habido una respuesta. También se trató de reclamar a Adif, «quien se desentendió diciendo que los contenedores no eran suyos», explica Ríos.

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«Alguna responsabilidad tendrá de esto Adif, cuando se encarga del mantenimiento de las vías», puntualiza el ingeniero técnico agrícola José Ignacio Santos, que está llevando a cabo las reclamaciones.

Los vagones, «que en su día se dijo que contenían mercancías peligrosas, suponemos que para evitar su manipulación, y realmente están llenos de madera uno y de turba otro», son de la empresa Continental Rail SA, cuya compañía de seguros, RSA, «dice que ya han tenido muchos siniestros y no se van a hacer cargo de este», explicaba el técnico.

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«No entiendo cómo nadie se hace responsable de todo esto, ni Adif ni la empresa propietaria de los vagones», lamenta el dueño de la finca

Así que el propietario de las huertas ha tenido que estudiar las posibilidades para retirar los restos. Para ello, habría que vaciarlos previamente de forma manual, y posteriormente sacarlos del camino con grúas. «Consultando a la empresa de grúas nos dicen que el coste rondaría los 140.000 euros –señalaba Santos–. Habría que ocupar la finca contigua, echar bolos de piedra, levantar los cultivos, volver a labrar la finca y sacarlos al camino para su transporte. Para vaciar los contenedores, además, necesitarían autorización de la empresa, que no se manifiesta». Otra opción sería desguazarlos, ya que se encuentran deformados y abollados y, una vez cortados, sacarlos al camino y su transporte a reciclaje.

«No entiendo cómo nadie se hace responsable –lamentaba el propietario de las tierras–. El tráfico se restableció a los días, pero han dejado todo por aquí».

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