Reubican 45 nidos de cigüeña para no dañar la colegiata de Alfaro
El plan de manejo de la cigüeña blanca ha trasladado los que se asentaban directamente sobre teja para evitar problemas de conservación al edificio y el riesgo de caída a la vía pública
EFE
Lunes, 2 de noviembre 2015, 16:47
El plan de manejo de la cigüeña blanca en la colegiata de San Miguel de Alfaro 2013-2016 ha permitido reubicar 45 nidos para evitar daños al edificio, lo que ha supuesto una inversión cercana a los 105.000 euros, ha afirmado este lunes el consejero de Medio Ambiente, Íñigo Nagore.
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La alcaldesa de Alfaro, Yolanda Preciado; Nagore y el párroco de la colegiata, Javier Martín, han presentado este lunes el balance del plan, cuyo fin ha sido el de tratar de compaginar la conservación de la importante colonia de cigüeñas de este edificio, "singular a nivel mundial", con la protección del patrimonio de interés histórico artístico de la colegiata, donde ha 89 nidos de estas aves.
Nagore ha calificado de "muy satisfactorio" el resultado del plan, consensuado entre el Gobierno regional, el Ayuntamiento de Alfaro y la Diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño.
Ha añadido que la reubicación de los 45 nidos ha permitido que toda la colonia de cigüeñas de la colegiata esté asentada en lugares apropiados.
Menos nidos y en otros lugares
Además, de acuerdo a los estudios previos a la ejecución del plan, estos trabajos han permitido reducir de 100 a 89 el número de nidos existentes en la colegiata, así como reubicar aquellos que se asentaban directamente sobre teja para evitar problemas de conservación al edificio y el riesgo de caída a la vía pública.
Lo que se ha hecho es retirar todos los nidos de las dos torres y el frontis delantero del edificio y trasladarlos a parrillas no ocupadas, a nuevas parrillas colocadas a tal fin y a los postes situados en los Sotos de Alfaro, en el entorno de la Molineta y en Tambarría, donde se han colocado a modo de señuelo para potenciar el asentamiento de cigüeñas en esas zonas.
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También se han colocados mallas en las repisas y ventanales de las torres, en los pináculos y en otras ubicaciones no deseadas para impedir el asentamiento de nuevos nidos; y se ha reforzado la sujeción de las antiguas parrillas para evitar desplomes o caídas a la vía pública.
Lo próximo: mantenimiento y limpieza
El plan ha supuesto una inversión conjunta cercana a los 105.000 euros, financiados parcialmente por la Unión Europa a través del FEADER, que ha aportado el 34 % del presupuesto.
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Nagore ha señalado que, a grandes rasgos, los principales problemas que plantea la existencia de nidos en la colegiata se producen cuando se trata de nidos que dan a la vía pública.
A ello ha sumado las situaciones creadas cuando el nido se coloca sobre algún elemento inestable que no pueda soportar el peso y cuando se apoyan directamente sobre las tejas por el riesgo de filtraciones y humedades que acarrean al retener las aguas de lluvia.
Para evitar esto último, se colocan las parrillas, que son unas estructuras metálicas que impiden que el nido apoye directamente sobre el tejado.
Una vez concluido el plan y establecidas las posiciones ideales, las actuaciones se complementarán con las labores de mantenimiento y limpieza de nidos que realiza anualmente la Diócesis, con el apoyo económico del Gobierno de La Rioja, a través de la línea de subvenciones que Medio Natural otorga desde 1994.
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