El olivar riojano mira a Andalucía

Pero los agricultores riojanos son conscientes de que a ellos les llegará impuesto el precio que recibirán por su trabajo porque lo que realmente marcarán las cuantías de esas cantidades a percibir son los kilos de olivas que se recojan y pongan en el mercado desde Andalucía –y más concretamente, desde Jaén–, que es quien produce la mayor parte de las olivas (y el aceite) español y marca la tendencia del mercado nacional.

Esta circunstancia parece beneficiar a los olivareros riojanos. Ismael Olmos explica que en Andalucía, «la mancha de flor era grande, pero parece que la climatología en la primavera y el verano no ha ayudado porque no ha llovido lo suficiente y se ha perdido mucha oliva», esa situación apunta a que la cosecha andaluza no será muy grande, algo que beneficiará a los riojanos. Si Andalucía no recoge mucha aceituna, la producción de aceite va a ser escasa, la oliva española se cotizará al alza y en el caso riojano habrá muchos kilos para vender por lo que el montante total de las operaciones será elevado. Eso al menos piensan algunos olivicultores riojanos que aspiran así a compensar los dos últimos años en los que había poca oliva y se vendía muy barata.

Javier Allo apela a su larga experiencia entre olivos (más de dos décadas trabajando con ellos en Aldeanueva de Ebro) para ser un poco menos optimista y asegurar que la oliva y el aceite no siempre se guían por la lógica, «como lo demuestra que ahora el aceite está bajando de precio cuando no hay abundancia de aceituna para producirla...».

En cualquier caso, Javier Allo reconoce que en Andalucía la cosecha de oliva no ha sido abundante en esta campaña «porque aunque aumente en un 130% respecto a la del año anterior, lo cierto es que se partía de unas cifras muy bajas, y no se puede decir que haya sido buena. Han pasado años muy complicados por la falta de agua».

Si los augurios se cumplen, esta será una campaña rentable para los olivareros y eso puede derivar –en opinión de Javier Allo– en una situación como la que ha experimentado en los últimos tiempos el sector del almendro: «Como es rentable, la tendencia es orientarse hacia el almendro, pues con el olivo nos ocurre igual, siempre vamos a rebufo», señala este olivicultor.